La red regional Voces del Sur registra en mayo de 2022 un total de 11 alertas de violaciones a la libertad de prensa en Nicaragua y dio seguimiento a 2 alertas generadas desde el año 2021.
Según el informe divulgado este viernes, 10 de junio, en total se documentaron 73 casos de violaciones a la libertad de prensa; 65 fueron perpetrados contra medios de comunicación lo que equivale al 89% del total de casos, y 8 fueron cometidos contra personas naturales lo que representa un 11 %.
«Del total de casos registrados, estos recayeron entre 11 víctimas (6 personas naturales, 5 medios de comunicación). De las personas naturales cuatro son del género masculino y dos del género femenino», señalan.
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Entre los periodistas que sufrieron agresiones por ejercer su trabajo está el periodista Jacdiel Rivera, corresponsal de Canal 10 en el departamento de Madriz. De acuerdo con la denuncia, el 15 de mayo de 2022, el comunicador recibió una llamada de un número desconocido en el que le indicaban que «anduviera con cuidado».
La persona —denuncia Voces del Sur— que realizó la llamada a Rivera le dijo que «las carreteras estaban peligrosas» y que lo mejor era movilizarse con cuidado porque cualquier cosa podía ocurrir. «Para el periodista se trata de una clara amenaza por su labor informativa ya que si bien en las carreteras sucede todo tipo de situaciones no es normal que una persona sin identificación y de la nada lo llame para advertirlo», detallan.
Otra de las periodistas en ser objeto de agresiones fue Tania López, originaria de León, quien señaló que agentes de Policía de Nicaragua la agredieron verbalmente y la obligaron a borrar el material que había grabado durante una cobertura periodística.
Según el relato de López, fuentes periodísticas la llamaron informándole que estaban capturando a sujetos señalados de varios delitos, dentro de cuales estaba la violación a una menor, por lo que se movió al lugar que se ubica en la Calle de la Colonia (en León) y cuando llegó encontró a una decena de personas discutiendo con los policías.
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«Me acerqué para ver y supe del descontento de la población hacia la Policía. Eso me armó de valor y proseguí a grabar. Mientras lo hacía dos antimotines se acercaron y me dijeron que si no borraba los vídeos y fotos me iban a llevar presa o a quitarme el equipo de trabajo. Sé que lo hacían para amedrentar» aseguró.
La periodista Kalúa Salazar, jefa de Prensa de Radio La Costeñísima, también denunció ante el promotor de la Libertad de Prensa de la RACCS que el 23 de mayo intentaron hackear su cuenta de Facebook. La contraseña fue introducida de manera incorrecta varias veces hasta que la plataforma bloqueó el acceso al no introducir el código de verificación que envían al número telefónico asociado.
Un año de «la funesta etapa» de judicialización a periodistas
Voces del Sur hizo énfasis que en mayo se cumplió un año desde que la Fiscalía de Nicaragua inició «la funesta etapa» de judicialización de la práctica periodística independiente.
«Entre mayo y agosto de 2021 al menos 58 personas, entre periodistas, ejecutivos y dueños de medios; fueron obligados a comparecer ante el Ministerio Público en medio de amenazas y hostigamientos», recordó la red regional.
Señaló que la judicialización contra el periodismo independiente de Nicaragua por parte del régimen de Ortega tuvo como subterfugio jurídico el inicio de una investigación en contra de la extinta Fundación Violeta Chamorro por el supuesto delito de lavado de dinero, bienes y activos.
«En los interrogatorios, los funcionarios de la Fiscalía intimidaron en todo momento a periodistas y comunicadores con la aplicación de la Ley de Ciberdelitos y la de Agentes Extranjeros», agrega Voces del Sur.
Preocupa censura al Canal Católico
El observatorio también expresó su preocupación por la a jornada represiva que implementa el gobierno sandinista en contra de la prensa no oficialista, la que también afectó a un medio de la Iglesia católica.
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Señaló que a través el Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (Telcor) la dictadura ordenó a las empresas de servicio de cable sacar de su programación al Canal Católico de Nicaragua -canal 51- propiedad de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN).
«La empresa Claro Nicaragua fue quien hizo pública la disposición de Telcor, fuentes periodísticas confirmaron que la orden fue dada a todas las empresas de cable que operan en el país. Días posteriores al cierre del Canal Católico, la señal reapareció bajo el nombre de Nicarao TV, donde se transmite propaganda gubernamental», relatan.
En 2021, Telcor canceló la frecuencia de Enlace Canal 21 y Radio Nexo, ambos medios de corte cristiano evangélico dirigidos por Guillermo Osorno, excandidato a la Presidencia del país. Para analistas independientes, se trata de una forma de censura para quienes denuncien violaciones a los derechos fundamentales.