El exembajador de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Arturo Mcfields afirma que el presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, busca acercamientos con el régimen de Daniel Ortega debido al descontento con Estados Unidos por los señalamientos de corrupción a su administración.
«La respuesta no es muy compleja, aunque sí difícil de creer. El presidente de Guatemala está molesto con la administración Biden y quiere que Estados Unidos lo sepa. El mensaje entre líneas es: si me continúan pisando los talones por presuntos actos de corrupción, les voy a dar donde más les duele, voy a fortalecer relaciones con la principal amenaza de Centroamérica, es decir, la dictadura familiar de Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo», refirió el exdiplomático en una redacción publicada en el medio digital Confidencial.
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El mandatario guatemalteco aseguró en una entrevista internacional que solicitará la salida del país de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), además de acusar a Estados Unidos de buscar derrocarlo. La relación entre ambos países se deterioró desde el 16 de mayo cuando Giammattei reeligió por cuatro años más a su fiscal general y jefa del Ministerio Público, Consuelo Porras.
Ante esta situación Giammattei ha dicho que no asistirá a la Cumbre de las Américas, «incluso ha comenzado a reciclar y recitar el viejo discurso antimperialista del injerencismo y por supuesto la autodeterminación de los pueblos», expresó Arturo McFields al respecto.
La semana pasada arribó a Nicaragua el canciller de Guatemala, Mario Búcaro, y se reunió con una docena de funcionarios sancionados por Estados Unidos. «Estos encuentros fueron tan productivos como el Canal Interoceánico de Nicaragua o la Refinería Supremo Sueño de Bolívar. Ninguno de ellos se concretó o dio fruto tangible, sin embargo, estos acercamientos tienen un simbolismo diplomático muy fuerte y peligroso», aseguró el exembajador.
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Continuó añadiendo que «los febriles coqueteos y la nueva retórica de Giammattei al único que benefician es al régimen de Ortega y Murillo, que recibe oxígeno fresco y unas cuantas migajas de legitimidad, tras haber masacrado a 355 personas y tener secuestrados a 180 presos políticos. No olvidemos que el único Jefe de Estado de América Latina que llegó a la toma de posesión de la dictadura fue el ahora reo Juan Orlando Hernández y dos dictadores bananeros que no vale la pena mencionar».
Por su parte, Estados Unidos ha catalogado a Guatemala como un país que ha dado «un paso atrás en la democracia» con la reelección de la funcionaria pues aseguran que es la responsable de «obstruir y socavar en repetidas ocasiones las investigaciones anticorrupción en Guatemala para proteger a sus aliados políticos y ganar favor político indebido».
