El Gobierno de Brasil, país que ocupa un escaño no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, pidió este martes una “solución negociada” a la crisis en torno a Ucrania y que se evite una “escalada de violencia”.
En un comunicado oficial, el Ministerio de Relaciones Exteriores reafirmó “la necesidad de buscar una solución negociada con base en los Acuerdos de Minsk, que lleve en consideración los legítimos intereses de seguridad de Rusia y Ucrania”, con un pleno respeto a “los principios de la Carta de las Naciones Unidas”.
Agrega que, frente “a la situación creada en torno al estatus de las autoproclamadas entidades estatales de Donetsk y Lugansk”, cuya independencia fue reconocida este lunes por Rusia, Brasil insta a “las partes implicadas a que eviten una escalada de violencia”.
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Asimismo, el comunicado pide establecer, “en el más breve plazo, unos canales de diálogo capaces de conducir de forma pacífica la situación en el terreno”.
La nota es acompañada con la declaración dada por el embajador Ronaldo Costa Filho, representante de Brasil en la ONU, en la sesión realizada la noche de este lunes por el Consejo de Seguridad para debatir el conflicto entre Rusia y Occidente.
“Un primer objetivo inevitable es obtener un cese al fuego inmediato, con la retirada de tropas y equipamientos militares del terreno”, a fin de “construir confianza, fortalecer la diplomacia y buscar una solución sustentable” dijo el diplomático.
La semana pasada, el presidente brasileño, Jair Bolsonaro, hizo una visita oficial a Moscú y fue recibido por su homólogo ruso, Vladimir Putin, con quien aseguró que trató de asuntos puramente comerciales y que no profundizó en el conflicto con Ucrania.
Bolsonaro dijo que solo manifestó su convicción de que “a nadie le conviene la guerra” y que también expresó su solidaridad con los países que “están empeñados en la paz”.