Tras la ola de pronunciamientos y solidaridad por la muerte del general en retiro Hugo Torres, donde diversos países del mundo expresaron su condena contra el suceso y demandaron al régimen la liberación total de los presos políticos, el sacerdote Edwing Román exhortó a la comunidad internacional a que imponga «mano dura para la dictadura de Nicaragua».
En su cuenta de Twitter, el padre Edwing Román aseguró que «no bastan las condenas, y los lamentos» y que es necesario actuar con «mano dura» contra la tiranía de Daniel Ortega y Rosario Murillo. El fallecimiento del preso político fue informado por su familia el sábado, 12 de febrero, en horas de la tarde.
Torres falleció bajo la custodia del régimen, fue capturado el 13 de junio de 2021 en su casa. Estuvo 244 días detenido, el 17 de diciembre habría sido trasladado a un hospital en Managua por el agravamiento en su salud. Su familia lo acompañó en sus últimos dos meses de vida.
Estados Unidos, El Salvador, Chile y Perú exigieron este fin de semana se esclarezca la muerte del exguerrillero sandinista y demandaron la libertad de todos los rehenes de conciencia cautivos en los diferentes calabozos del régimen de Ortega.
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Hugo Torres fue encerrado por Daniel Ortega durante la embestida contra opositores y disidentes ejecutada entre mayo y junio de 2021. Desde su captura y allanamiento a su vivienda, el exguerrillero y miembro del partido Unión Democrática Renovadora (Unamos) fue recluido en la Dirección de Auxilio Judicial, conocida como «El Chipote».
Hugo Torres Jiménez fue acusado por la dictadura de Ortega por el supuesto delito de «conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional» y la supuesta víctima es el Estado de Nicaragua. La Ley 1055, Ley de Soberanía, es la herramienta jurídica que creó el régimen para perseguir a sus opositores y encarcelarlos.
El repudio por la muerte de Torres se ha generalizado a nivel nacional e internacional. La Organización de Estado Americanos (OEA) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) han exigido respuestas claras por la muerte del disidente sandinista.