Al menos 30 opositores encarcelados en Nicaragua, denominados “presos políticos”, están más expuestos a “malos tratos o torturas”, denunció este viernes el Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas, un observatorio cuyos datos son avalados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
“Un total de 30 personas presas políticas se encuentran en condiciones de reclusiones distintas o discriminatorias, bajo las cuales suelen ser sometidos a un mayor número de incidentes de malos tratos o torturas”, indicó el Mecanismo, en su último informe.
Entre los reos que diferentes organismos defensores de los derechos humanos han denunciado que están en cárceles de máxima seguridad o aislamiento está la dirigente de la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco, Tamara Dávila, así como personas que participaron en protestas antigubernamentales, como Kevin Solís, Gustavo Beteta, Junio Marenco y Carlos Bonilla.
Noticia relacionada: Canciller español demanda, en reunión con Blinken, la liberación de los presos políticos de Nicaragua
Los malos tratos citados en el informe se basaron en denuncias de los reos sobre “mayor número de golpizas, incomunicación con sus familias por largos periodos, o suspensión injustificada de las visitas, amenazas de aislamiento total en celdas empreñadas, limitado suministro de alimentos, insuficientes salidas al patio de sol, retiro de Biblias, o luces encendídas todo el día”.
Aunque dichas acciones son denunciadas por los 170 “presos políticos”, estas son más frecuentes entre el grupo de 30 que se encuentran bajo “reclusión discriminatoria”, de las cuales 16 están bajo máxima seguridad, nueve en celdas de castigo, y cinco en aislamiento, de acuerdo con el Mecanismo.
En el caso de los familiares de este grupo, el observatorio también sufren “persecución”, malos tratos verbales, discriminación en el recibimiento de productos para los reos, entre otros.
Noticia relacionada: «Negarles abrigo en sus celdas es tortura», denuncian familiares de los presos políticos en El Chipote
Entre los “presos políticos” están siete que habían anunciado sus intenciones de competir por la Presidencia de Nicaragua, dos exvicecancilleres, dos históricos exguerrilleros sandinistas disidentes, un dirigente empresarial, un banquero, una exprimera dama, cinco dirigentes opositores, un periodista, y dos líderes estudiantiles.
El total de “presos políticos” en Nicaragua supera los 170, según el Mecanismo, ya que hay reos cuyos familiares solicitan no sean incluidos en la lista.
De los 170 opositores presos, 160 fueron capturados después del estallido antigubernamental en abril de 2018, incluyendo lo siete que aspiraban a competir con el presidente Daniel Ortega en las elecciones del 7 de noviembre pasado, en las que el mandatario se impuso para su quinto mandato de cinco años, cuarto consecutivo y segundo con su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta.