La vocera del régimen de Nicaragua, Rosario Murillo, informó que este 2022 la República Popular China donará a Nicaragua un total de 2 millones de vacunas contra el COVID-19 para continuar la inmunización de la población en el país.
El nueve de diciembre de 2021, la dictadura Ortega-Murillo rompió relaciones diplomáticas con Taiwán y retomó lazos de amistad con China continental. En los últimos días de diciembre del año pasado, el Ministerio de Salud (Minsa) recibió un donativo de 1 millón de inyecciones Sinopharm antiCOVID-19 por el nuevo aliado de la dictadura.
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Pero la cooperación de China al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo no se limitará solo vacunas contra el coronavirus en 2022. La primera dama y vicepresidenta de Nicaragua anunció que el Minsa recibirá en los próximos días de Pekín un donativo de equipos médicos para «seguirnos protegiendo y promover la salud».
Según Murillo, el Gobierno de la República Popular China entregará «equipos» al Minsa para combatir el COVID-19 que consisten en respiradores, mascarillas, pruebas, desfibriladores, incubadoras para bebés, catéteres, sábanas, hisopos, guantes, máscaras de oxígenos, ropa protectora, cubre zapatos y «todo lo que se requiera para proteger en los hospitales; en primer lugar a los trabajadores de la salud que están expuestos todo el tiempo; que no dejen de trabajar en su misión de servicio, con amor a nuestro pueblo».
La vocera de Ortega adelantó que las relaciones bilaterales con China no se limitarán al apoyo en el tema de salud que ya recibió el Minsa y se ampliará en este año; sino que también se abordarán temas como comercio, asistencia técnica y viviendas sociales, programas muy parecidos a los que apoyaba su antiguo aliado Taiwán.
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El pasado 31 de diciembre de 2021, China continental inauguró su sede diplomática en Managua con la presencia de funcionarios leales al dictador y los hijos de la pareja presidencial. El 10 de enero, día de la toma de posesión, Ortega, Murillo y su hijo Laureano sostuvieron una reunión con una delegación de Pekín y suscribieron cuatro acuerdos «sobre el establecimiento del mecanismo de consultas políticas»; «acuerdo marco» que abarca la generalidad del apoyo mutuo entre ambas naciones; «memorando de entendimiento» sobre la «cooperación en el marco de la franja económica de la ruta y la seda y la ruta marítima de la seda del siglo XXI» y un acuerdo sobre «exoneración mutua de visas» para quienes porten pasaportes diplomáticos, de servicios, o de asuntos oficiales.
Los millones que donó Taiwán a Nicaragua
Taipéi era el donante bilateral más importante de Nicaragua, país donde financiaba 27 proyectos en áreas de producción de alimentos, cultivos de frutales y cría de cerdos de calidad superior, entre otros, por valor de entre 30 millones y 50 millones de dólares, según datos del régimen nicaragüense.
Taiwán se había caracterizado por entregar a Nicaragua donaciones millonarias para distintas áreas, incluyendo la construcción del nuevo estadio nacional Denis Martínez, que tuvo un valor de más de 35 millones de dólares, aunque el régimen desvió los fondos para construir viviendas en la urbanización Ciudad Belén y luego tuvo que recurrir a préstamos de multilaterales.
China fue uno de los seis países que reconoció a Daniel Ortega como gobernante, tras las elecciones sin competencia del pasado siete de noviembre. Taiwán se mantuvo al margen, en un desconocimiento tácito del «triunfo» sandinista, en sintonía con Estados Unidos, un aliado natural de la isla asiática.
