En el marco del «Día Internacional de lucha en contra de la Violencia hacia las Mujeres», el Movimiento Autónomo de Mujeres de Nicaragua (MAM) demandó al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo que cese las torturas «que ejerce con mayor crueldad en contra de las mujeres».
La organización indicó que en las cárceles de la dictadura permanecen 160 ciudadanos por razones políticas, señalados falsamente de diversos delitos y procesados bajo “leyes espurias”.
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Indican que, entre los reos, hay 14 mujeres sometidas a torturas, tratos crueles, inhumanos y degradantes por querer vivir en un país en democracia. Muchas de ellas sin poder ver a sus hijos e hijas.
La organización Católicas por el Derecho a Decidir (CDD) reporta 66 femicidios en lo que va del año, cifra que se ha mantenido en aumento en los últimos cinco años. Las feministas alertan que el crimen ha afectado a 96 niñas, niños y adolescentes que han quedado sin sus madres.
A su vez, 120 mujeres han sido víctimas de intento de asesinato a manos de hombres. Afirman que «en Nicaragua existe un Estado criminal que rechaza la vida de las mujeres» especialmente en el actual contexto de persecución política.
La opositora Evelyn Pinto Centeno, de 62 años, fue detenida el pasado seis de noviembre, horas antes de las “ilegítimas” elecciones de Daniel Ortega. Según sus familiares, más de 20 policías realizaron «el operativo» en su casa para detenerla sin orden judicial y a la fecha no se les ha permitido las visitas familiares.
Indican que «a través de su vida tanto personal como laboral, Evelyn Pinto ha trabajado por los derechos humanos, en especial por los derechos de la niñez y la adolescencia, los derechos de las mujeres y de los pueblos indígenas».
Miles de matagalpinos, mayoritariamente vistiendo de azul y blanco, portando banderas de Nicaragua y de la Iglesia, participaron de la Peregrinación por la paz y justicia en Nicaragua, convocada por el obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando José Álvarez Lagos. LA PRENSA/LUIS EDUARDO MARTÍNEZ M.
El obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, respondió a los ataques constantes de la pareja presidencial de Nicaragua en contra de la Iglesia católica. Daniel Ortega y Rosario Murillo han amenazado a los religiosos hasta con cárcel.
Álvarez dijo a los creyentes que no tienen «que preparar de antemano su defensa porque nosotros vivimos de la palabra». Añadió que no tienen nada que temer porque «no hemos cometido delito» y cualquier acusación en su contra será «inventada o calumniada» ya que lo único que ha hecho la Iglesia católica es denunciar la injusticia.
El religioso expresó que no deben de entretenerse con cualquier tipo de amenaza, «no, no nos entretengamos en eso, tenemos muchas cosas a qué dedicarnos, como para entretenernos en esas pequeñeces». Reiteró que la persecución no los intimida, recordando que hasta al propio Jesucristo lo señalaron de que «expulsaba demonios por el poder de Belcebú, qué no podrán decir de nosotros».
El jerarca afirmó que su deber es anunciar la buena noticia a los pobres y la libertad a los presos «y si por eso vendrán persecuciones, calumnias y ofensas, hermanos ya el Señor lo había anunciado hace dos mil años».
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El régimen de Nicaragua designó a un nuevo embajador en Cuba. Se trata de Sidhartha Francisco Marín Aráuz, el actual asesor presidencial para políticas y asuntos internacionales de Daniel Ortega.
El nuevo representante de Nicaragua sucede a Luis Cabrera González, el primer y único embajador que Daniel Ortega ha designado en el cargo desde el 2007. El nuevo embajador Marín Aráuz también ha ocupado otros cargos diplomáticos ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) y en países de América del Sur.
