A tres días de las elecciones presidenciales en Nicaragua, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo siguen urgidos para que sus bases acudan a los centros de votación, a pesar que han hecho todo lo que ha estado a sus alcance para imponerse por cuarto periodo consecutivo.
Fuentes en condición de anonimato, informaron a Artículo 66 que coordinadores del Consejo del Poder Ciudadano (CPC) han ejecutado en todo el país desde hace un mes «el plan de movilización elecciones 2021» con el fin de asegurar que todos sus militantes lleguen a votar por los dictadores de Nicaragua.
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«Los CPC andan dejando casa a casa un documento para saber si somos sandinistas si tenemos algún cargo en el partido; no es el primer papel que vienen a dejar, semanas atrás le dejaron uno, donde tenía que llenarlo y firmarlo, donde se comprometía a votar en la casilla dos», expresó una ciudadana de Masaya, quien evitó decir su nombre por temor a represalias.
Otra ciudadana consultada por este medio de comunicación refirió que este jueves, cuatro de noviembre, los personeros del Frente Sandinista llegaron a su casa para decirle que «toda la familia está invitada para el domingo — siete de noviembre— a visitar el centro de votación».
«El papel que trajeron hoy ya viene marcado con lapicero que se tiene que votar en la “casilla 2″» agregó la ciudadana consultada, quien además dijo que en una visita de hace varios meses los CPC ofrecieron el carnet de militante sandinista, ya que según ellos, el carnet daría algunas facilidades, «pero no sé a que se referían con eso».
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Además de promover y exigir que sus fanáticos acudan a las cuestionadas elecciones de Daniel Ortega, la fuente dijo que los CPC de cada sector han realizado grupos de Whatsapp para informar de sus actividades.
Otra de las anomalías que denuncian las personas que han sido obligadas a votar por el dictador Daniel Ortega, es que el régimen se ha visto obligado a ocupar casas de sus militantes para mantener «vigilancia» en los sectores de cada ciudad.
En cuanto a que si el «plan» de Ortega está funcionando para que los ciudadanos voten por él, los entrevistados expresaron que «no, ¿para qué? Eso es ir a perder mi tiempo, si ya se sabe quien va a ganar o más bien ya sabemos quién se robará las elecciones».
Pese a que Ortega está simulando como legítimos unos procesos que la comunidad internacional ha calificado como una farsa, sectores de la oposición dentro y fuera de Nicaragua siguen llamando a no votar.