El lunes, cuatro de octubre, pobladores denunciaron una nueva invasión de colonos a las comunidades indígenas Mayagnas donde hasta el momento se ha reportado un fallecido y tres personas desaparecidas. El Gobierno Territorial Mayagna Sauni As al fin rompió el silencio ante los acontecimientos y denunció la «usurpación, invasión, constantes amenazas y violación a los derechos humanos».
Hasta el momento el régimen de Daniel Ortega sigue ignorando estos acontecimientos, pero el gobierno territorial de la comunidad indígena Mayagna demanda acciones al Estado y una pronta respuesta para realizar un saneamiento de colonos y evitar así más masacres en las zonas. «Exigimos al presidente de la republica instaurar un diálogo franco y directo para el saneamiento de nuestro territorio, a las autoridades de seguridad desmantelar a los criminales», demandan.
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Solicitan a la comunidad internacional pronunciarse y hacer un llamado a las autoridades de Nicaragua para que su petición sea «atendida con prontitud, demandamos acciones reales, así como garantías de no repetición de los asesinatos e invasiones en nuestros territorios sagrados», destacan en el documento.


El Gobierno Territorial Mayagna recordó la reciente masacre ocurrida durante el mes de agosto, que dejó más de 11 muertos atacados por invasores que querían arrebatarles las tierras a los pobladores, según reportes de los habitantes, quienes también denunciaron que la Policía culpaba y perseguía a los indígenas en lugar de hacer justicia contra los colonos.
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«Antes de la época colonial hasta la fecha, la historia de lucha de los pueblos originarios Mayagnas ha sido la tierra, motivo de vida para el pueblo Mayagna y por otro lado, la ambición desmedida de los ganaderos roba tierras y comerciantes de la madre naturaleza», denuncia el comunicado.
Los distintos movimientos en defensa de los derechos humanos han solicitado que se atienda el problema que ha perdurado por años en las zonas vulnerables del corazón de Bosawás, invadidas por personas armadas con intereses económicos en las tierras indígenas.