La periodista Verónica Chávez, esposa del precandidato presidencial y preso político Miguel Mora Barberena, fue interrogada por segunda vez en el Ministerio Público, donde los fiscales, según dijo la comunicadora, le hicieron prácticamente las mismas preguntas, insistiendo en torno al caso de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro, organización de la sociedad civil a la que la dictadura Ortega-Murillo acusa de lavado de dinero.
Al salir del interrogatorio, Chávez dijo a los medios de comunicación que no tiene miedo de ser arrestada porque no ha cometido ningún delito y ha asistido a las citas que le han hecho.
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«Yo no he cometido ningún delito. Vengo acá porque no tengo nada que temer. Me están pidiendo venir, contesto lo que me pregunten y me voy a mi casa. Yo estoy en las manos de Dios, no he cometido ningún delito. Yo estoy en función de mi esposo que está capturado y en función sobre todo de Miguelito (su hijo) que es un niño especial y que me necesita», expresó Chávez cuando entraba al edificio de la Fiscalía.
Tras casi dos horas de cuestionamientos, la periodista salió y explicó que los fiscales «me hicieron las mismas preguntas que la primera vez, solo que un poco más en detalles. Que si conocía la Fundación (Violeta Barrios de Chamorro), que si conozco a las personas (de la organización), que si conozco los vínculos y que si yo tenía vínculos con ellos», insistieron los interrogadores.
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La periodista aseguró que solo se limitó a contestar las preguntas que le hicieron, pues no tiene nada que ocultar porque ni ella ni su esposo, Miguel Mora, han cometido delitos.
Consultada si tenía temor de ser detenida tal como lo han hecho con otros ciudadanos que han sido citados al Ministerio Público y luego llevados a la cárcel, Chávez afirmó que no teme porque «he asistido a sus entrevistas, he contestado sus preguntas, no tienen por qué arrestarme».
Piden visita especial para su hijo
Al referirse al encarcelamiento al que está siendo sometido su esposo, que lleva más de un mes aislado en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial conocidas como El Nuevo Chipote, Chávez reiteró que siguen sin poder verlo, solo le permiten pasarle líquidos como agua o jugos y tampoco le permiten ser asistido por su abogado ni atendieron a la solicitud de visita especial que hizo para que su hijo pueda ver a su papá.
«Yo siempre voy a El Chipote donde está capturado, y todavía no me han permitido verlo. Vamos a dejarle sus líquidos que es lo único que me permiten. Nosotros hicimos una solicitud especial para que Miguelito pueda ver a su papá, pero todavía no la han contestado. Miguelito necesita ver a su papá porque con él hacía algunas terapias», explicó la esposa de Miguel Mora.
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Indicó que en la Fiscalía siguen sin darle respuesta a la denuncia que interpuso Miguel Mora, en representación de ella, en octubre del año pasado en contra del dictador Daniel Ortega, el jefe de la Policía, comisionado Francisco Díaz, y el primer y segundo jefe de la Policía de Masaya, comisionado general Luis Barrantes y comisionado Mario Aguilar respectivamente, por los delitos de tentativa de asesinato, amenazas con armas, lesiones graves, abuso de autoridad e incumplimiento de funciones y omisión de perseguir delitos.
El 11 de octubre la periodista fue ingresada a una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Vivían Pellas, lesionada producto de una pedrada que recibió en la cabeza al finalizar reunión de la Coalición Nacional en Masaya, cuando una turba de simpatizantes de la dictadura en presencia de la Policía los agredió.
«Me dicen que vaya a preguntar por la denuncia a la Fiscalía de Masaya que fue donde la presentamos y cuando voy a Masaya me dicen que pregunte aquí en Managua, entonces no sé que pasa», se quejó la periodista.