El Gobierno de Nicaragua, encabezado por Daniel Ortega y Rosario Murillo, decretó «por protocolo» tres días de duelo nacional por el fallecimiento de Enrique Bolaños Geyer, expresidente de la República de Nicaragua entre 2002-2007, quién falleció la noche del lunes, 14 de junio.
«Como corresponde con el protocolo y los honores que el Estado nicaragüense rinde a mandatarios y personalidades, está decretando 3 días de duelo nacional con las banderas a media asta en todo el país», resalta la nota de prensa emitida por el Gobierno.
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Además, el comunicado hace énfasis en que «don Enrique Bolaños, desde su condición de ciudadano estudioso, historiador, trabajador, productor y hombre dedicado a promover el conocimiento de la Historia desde su propia experiencia y perspectiva, deja a Nicaragua un legado documental que seguramente será reconocido por Academias y Centros de Educación y Cultura Nacional».
El expresidente Bolaños soñaba con una nueva y transformada Nicaragua, y sus familiares solicitaron recordarle con su legado donde los «buenos nicaragüenses piensan más en la patria que en ellos mismos». La ciudadanía nicaragüense lo recuerda como un hombre accesible, carismático, leal con sus principios y sobre todo comprometido por su patria.
Cabe señalar, que en el 2001 lanzó su candidatura a la Presidencia de la República, llevando como fórmula a jinotegano José Rizo Castellón (q.e.p.d). Se alzó con el triunfo y estuvo en el poder entre 2002-2007. Su lema de campaña fue «gobernabilidad, democracia y transparencia: muchos retos, dos opciones, una alternativa». En los comicios de ese entonces alcanzó un contundente triunfo con el 56,3 % de los votos. Entre los derrotados estaba la fórmula sandinista Daniel Ortega-Agustín Jarquín. Era el tercer intento seguido de Ortega por retornar al poder.
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Por otra parte, las honras fúnebres del exmandatario nicaragüense se hicieron de manera privada, en el seno familiar y en sintonía virtual debido a la actual situación de pandemia de COVID-19 que enfrenta el mundo y de la cual Nicaragua no está exenta.
«Sabemos que en otros tiempos nos acompañarían a darle el último adiós, sin embargo él, desde su quebranto de salud, llamó siempre a la prudencia y al cuido. Inspirémonos en el legado de don Enrique; el legado de los buenos nicaragüenses que pensaron más en la patria que en ellos mismos. Es el mejor tributo que le podemos rendir», señala el breve texto firmado desde El Raizón, Nindirí, este quince de junio de 2021.
En ese tiempo los sandinay hacian tranques y paralizaban el pais. Parese q no lo recuerdan ….ahora si alguien quiere manifestarse pacificamente lo tildan de terroriatas. Y ellos q serian en esa epoca? La verdad es q a los ortega murillo les abunda la ignorancia. Son detestables y una plaga espantosa