Por segundo día consecutivo, primero fue el 20 de mayo; la Policía al servicio del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo impidió que los precandidatos a la Presidencia de la República de Nicaragua Juan Sebastián Chamorro y Félix Maradiaga salieran de sus casas. Según los opositores, los uniformados les dijeron que «ni se les ocurra salir, hasta nuevo aviso».
En horas de la mañana de este viernes, 21 de mayo, Juan Sebastián Chamorro denunció que agentes policiales que lo vigilan las 24 horas del día le bloquearon la salida de su casa, ubicada en Intermezzo del Bosque, en Managua, cuando se disponía a asistir a una misa.
Los agentes de la dictadura expresaron a Chamorro que no lo dejarían movilizarse en la capital, porque «Nicaragua quiere paz. No hay salida. Ustedes fomentan la violencia».
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«Un comisionado de apellido Cárdenas me dijo que no puedo salir, hasta nuevo aviso. Me impusieron casa por cárcel únicamente por no estar a favor del régimen de Daniel Ortega y por querer una Nicaragua libre», denunció Chamorro ante Artículo 66.
La misma acción intimidatoria la vivió otra vez el precandidato Félix Maradiaga. Varios oficiales llegaron a su actual residencia en Satélites de Asososca y le comunicaron que «no puede salir de la casa y que ni lo intente».
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Según Maradiaga, un oficial encargado del grupo represor, le notificó que hasta nuevo aviso podrá salir, porque le impusieron casa por cárcel. La Unidad Nacional Azul y Blanco, agrupación a la que pertenece el politólogo, condenó esta acción ilegal, que llega un día después que el politólogo llamara a salir a las calles en demanda de justicia y democracia.
Pese a las agresiones y la violación a sus derechos, Chamorro insistió que se debe seguir en la lucha para sacar a la dictadura orteguista. La arremetida de la dictadura contra aspirantes a la Presidencia de Nicaragua inició el jueves, 20 de mayo. Primero, fue contra Cristiana Chamorro, a quien la dictadura acusa de lavado de dinero. Luego Félix Maradiaga, que fue agredido con empujones para que no saliera de su casa y posterior a Juan Sebastián Chamorro, al que le dijeron que no saldrá porque insta a la violencia.