Según lo recolectado en la escena del crimen y las diferentes pruebas químicas y biológicas practicadas, de conformidad con los procedimientos de la investigación forense, la joven de 17 años Ivón Marcela Carvajal Moreno fue abusada sexualmente y asesinada por su propio padre, afirmó la Policía Nacional en un parte divulgado este lunes, 17 de mayo, a través de su sitio oficial de internet.
El cuerpo de la adolescente fue encontrado el 11 de mayo en un predio montoso de la comunidad de Sabana Grande, del municipio de Managua. Según la información oficial, «el autor de la muerte y abuso sexual de la adolescente es su propio padre biológico Bismarck Alí Carvajal Zamora».
Noticia relacionada: Adolescente es estrangulada y abandonada cerca de basurero en Managua
De acuerdo con la información, «el cuerpo fue examinado por un médico forense del Instituto de Medicina Legal (IML), quien determinó que la causa de muerte (de la joven) fue asfixia mecánica, estrangulamiento a lazo». Tal información fue hecha publica, según el boletín policial, por el comisionado mayor Victoriano Ruiz, segundo jefe de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ).
Entre las pruebas recolectadas figuran «vestimenta de la menor, su faja, una toalla y muestras de sangre, Además, fibras de cabello, recortes de uñas, así como muestras de hisopado vaginal para realizar peritaje químico y biológico, con las que se realizó un perfil genético de la víctima y se comparó con el perfil genético de su padre, Carvajal Zamora».
Agrega que «en la toalla color amarillo, encontrada en la escena del crimen, se determinó perfil genético del sexo masculino que coincide con el perfil genético de Bismarck Alí», lo que llevó a los peritos a establecer que el culpable de la muerte de la joven es el padre, por lo que el delito está siendo tipificado como «parricidio» más violación.
Noticia relacionada: Feministas conmemoran Día contra la violencia hacia la mujer exigiendo el cese de la impunidad
La jovencita fue reportada como desaparecido por uno de sus tíos, quien informó a las autoridades que había salido con rumbo a donde unos familiares en el barrio Las Américas 1, de la capital y no se había vuelto a saber de ella, hasta que su cuerpo fue encontrado sin vida al siguiente día de su desaparición.
El informe de las investigaciones policiales indican que «el pasado 10 de mayo, a las 12:13 minutos del medio día, Bismarck Alí se presentó a su casa a bordo de un automóvil color azul marca Toyota Scion, placa 254751 y discutió con su hija».
Añade «a víctima le reclamaba (a su padre) por abusos sexuales que le hacía a ella y su hermana, lo que lo llevó a forcejear con la menor, en el forcejeo le colocó la faja alrededor de su cuello y la asfixió».
Noticia relacionada: Naciones Unidas, alarmada por incremento de violencia contra la niñez en Nicaragua
Luego de quitarle la vida a la menor, según la Policía, el ahora supuesto parricida habría envuelto el cuerpo de su víctima en un edredón y lo fue a lanzar a Sabana Grande, del segundo portón de la Kola Shaler, 160 metros al norte, 70 metros al este. De esa manera, la Policía da por esclarecido ese crimen contra una menor que, según las leyes recientemente aprobadas por el régimen Ortega-Murillo, podría ser juzgado como «crimen de odio» y se le aplicaría la pena de prisión perpetua revisable