La vocera gubernamental Rosario Murillo anunció la tarde de este jueves, 19 de noviembre, que producto de otro deslave, tres personas más se sumaron a la lista de víctimas mortales dejadas por el paso del Huracán Iota por Nicaragua. El suceso ocurrió en la comunidad El Puyú, entre Waslala y Mulukukú, en el departamento de Matagalpa.
Murillo indicó que los fallecidos son: Adonis Blandón Reyes, de 15 años, Pedro José Blandón Reyes de 22 y Sayda Sujey Blandon Reyes de 9 años, los que perdieron la vida producto de un deslizamiento que provocó la crecida del río El Puyú. En el suceso sobrevivieron la señora Perfecta Reyes, de 43 años y el señor Arlen Blandón, de 41, madre y padre respectivamente de los tres fallecidos. Además quedó con vida Arelis Blandón Reyes, de 20 años, hermana de las victimas mortales.
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De acuerdo con la información dada a conocer por la vocera del régimen, el deslizamiento habría ocurrido la noche del miércoles 18 de noviembre y dijo que no habían dado la información porque el Ejército Nacional, la Policía y la Alcaldía de la zona estaban buscando los cuerpos y atendiendo a los sobrevivientes.
«Ayer un pastor evangélico, por la noche, muy tarde, nos avisó, allá en Matagalpa, al compañero Pedro Haslam, sobre un deslizamiento en el cerro El Puyú, del lado de Mulukukú, en el límite entre Waslala y Mulukukú. A la orilla del río El Puyú vivía una familia, la casa fue arrasada por el río, ahí se habían quedado. No habíamos informado porque estaba el Ejercito, la Policía, los compañeros de la Alcaldía, buscando los los cuerpos y atendiendo a los sobrevientas», dijo la vicedictadora que ha manejado centralizada la información sobre la tragedia humana que provoco el huracán Iota en Nicaragua.
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Con estos tres fallecidos, reconocidos oficialmente por el régimen, la lista de víctimas mortales ocasionadas por Iota se eleva a por lo menos 21 y dos desaparecidas que, según Murillo, aun siguen buscando entre los escombros lodosos de el Macizo de Peñas Blancas, en el municipio de El Tuma-La Dalia, departamento de Matagalpa. Las desaparecidas son: Flor López Aráuz, de 38 años y su hija Hassel Otero López, que a su vez es mamá de la niña de dos años que fue sepultada el día de ayer en La Dalia y que perdió la vida en el mismo deslave de Peñas Blancas.
