Al menos cuatro oficiales se encuentran en las entrada de las oficinas del Movimiento de Mujeres María Elena Cuadra, ubicado en Managua, donde los uniformados se apostaron la mañana de este 25 de septiembre, impidiéndoles el paso al equipo de trabajadoras de esa organización, que está a cargo de la activista feminista y miembro de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD), Sandra Ramos.
En la zona, también se encuentra una patrulla estacionada y motorizados merodeando. Los policías al servicio del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo están cercando la zona, pero no dan ningún argumento sobre sus intenciones. Sandra Ramos es una de las feministas más críticas dentro del país en contra de la dictadura.
El Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca+ condenó esta nueva embestida de los Ortega-Murillo y señaló que ya «son más de 29 meses de sistemática represión y persecución contra todas las expresiones ciudadanas de Nicaragua».