La Policía al servicio de los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo, en colusión con paramilitares, secuestró al ciudadano José Aburto Pichardo, originario del municipio de Tisma, del departamento de Masaya. Según sus familiares el hecho se dio cuando las autoridades del régimen llegaron sin ninguna orden judicial a apoderarse de la propiedad que le pertenece al detenido.
Yelba Asunción Aburto Medina, de 19 años, hija de José Aburto Pichardo, fue golpeada brutalmente por los uniformados que llegaron a catear su propiedad. Según denunció ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), siete patrullas de la institución policial, con más de 60 antimotines y paramilitares, llegaron a la propiedad y sin mediar palabras comenzaron a golpear a su progenitor, llevándoselo detenido junto a uno de sus sobrinos de nombre Francisco Aburto. “Los antimotines entraron a la propiedad y comenzaron a golpear sin razón a mi papá (José Aburto Pichardo), al ver yo la agresión, salí en defensa de él y uno de los antimotines me golpeó, rompiéndome la ceja, luego nos montaron a la fuerza a la patrulla, pero a mí me dejaron libre”.

Además, la hija del detenido denunció que al momento del arresto, los uniformados orteguistas estaban asfixiando a su papá y uno de los policías le puso la bota en el rostro. “También le aflojaron los dientes y lo golpeaban en sus partes íntimas con las armas que ellos (la Policía) caminan”.
Denuncian que dictadura pretende apoderarse de la propiedad
Según Yelba Asunción Aburto, la intención de la dictadura de Daniel Ortega es apoderarse de la propiedad, a sabiendas que le pertenece legalmente a esta familia. “Se metieron a la propiedad a la fuerza y sin ningún documento. Querían apoderarse de nuestras tierras, lo único que la Policía sabe decir que es la procuraduría la que dio la orden, pero no muestran ninguna orden de allanamiento”.
Por su parte, el abogado Pablo Cuevas afirmó que este es un actuar arbitrario por parte de la Policía de Daniel Ortega, que con amaño quiere adueñarse de una propiedad privada. “Desde el principio los ciudadanos refieren que tienen escritura legitima de su propiedad. Todos sabemos que ninguna autoridad puede ingresar a una propiedad privada si no es con una orden judicial. Las autoridades debieron haber presentado una orden y al no presentarla están cometiendo el delito de allanamiento ilegal”.
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“En vez de cometer este delito, se debió de hacer un juicio y el juez debió actuar de manera imparcial, pero aquí hay una situación oscura, cometida por parte de la autoridad. Lamentablemente a diario se vienen ocurriendo hechos como este, donde personas que tienen algún poder y les gusta alguna propiedad, hacen uso de ese poder para usurpar y en el proceso de apropiación hacen actúan con violencia en contra de propietarios, que simplemente exigen una explicación”, fustigó Cuevas.
Exigen liberación de detenidos
Maira Azucena Bermúdez, esposa del detenido, exige la liberación de su esposo y de su sobrino Francisco Aburto, porque afirma que la detención es arbitraria. Bermúdez, además exige a la dictadura que los antimotines y paramilitares abandonen la propiedad. “Por favor le pedimos a las autoridades que nos dejen de hostigar, porque muy bien saben que esta propiedad es nuestra y quieren apoderarse a la fuerza. Lo peor es que después de la detención de mi esposo, los policías y paramilitares se pasean campantemente en todo el pueblo, como que ellos fueran los dueños”.
Al cierre de esta nota, los ciudadanos aún se encontraban detenidos en la delegación policial del municipio de Tisma. Según el abogado Pablo Cueva, la CPDH dará seguimiento a este caso, donde según él “es evidente que se están violentando el derecho de los propietarios”.