La Policía al servicio de los dictadores Daniel Ortega y Rosario secuestró la tarde del viernes, 22 de mayo, al ciudadano Marvin Antonio Rodríguez López, de 52 años, vendedor de repuestos de vehículos, originario del barrio indígena de Monimbó, en Masaya. Según sus familiares, la detención arbitraria se dio cuando este salió de su casa a realizar la venta de una llanta de carro.
María de los Ángeles Téllez, hermana del detenido, dijo a Artículo 66 que la Policía orteguista informó que habían allanado la casa de la esposa de Marvin Rodríguez en el municipio de Masatepe y encontraron drogas, armas y una fuerte cantidad de dinero. “Mi hermano fue engañado, recibió una llamada telefónica para que vendiera una llanta, fue al lugar y allí lo detuvo la Policía, ahora dicen que lo encontraron con drogas, lo cual es falso”.
También, la hermana del detenido informó que en la delegación policial de Masaya le indicaron que había sido trasladado a la Dirección de Auxilio Judicial, conocido como “El Nuevo Chipote” en Managua. “No lo hemos podido ver, lo único que dijeron en la Policía es que esto va para largo. Sabemos que esto es represalia contra él (Marvin Rodríguez), porque nuca ha estado a favor de este gobierno”.
Dos veces secuestrado
El año pasado (2019) Marvin Rodríguez fue secuestrado en dos ocasiones mientras se encontraba en su casa, donde funciona una venta de repuestos de vehículos. La primera captura fue el dos de julio, cuando agentes de la Dirección de Operaciones Especiales de la Policía allanaron su vivienda y lo acusaban de posesión de bombas de contactos y químicos para fabricar explosivos. Luego de cinco días bajo “proceso de investigación” fue dejado en libertad.
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La segunda detención arbitraria fue el 27 de septiembre, de igual manera, los agentes del régimen entraron a su casa sin ninguna orden judicial, con la excusa que llegaban a buscar químicos explosivos. Esa vez estuvo ocho días secuestrado en la Dirección de Auxilio Judicial, en Managua. “La dos veces que lo detuvieron no le encontraron nada, pero ahora le tienden una trampa y lo acusan de delitos que no ha cometido. “Ya sabemos que es una excusa del gobierno para secuestrar a todos los opositores”, expresó molesta la hermana del detenido.
En medio de una crisis sanitaria, la dictadura de Daniel Ortega continúa secuestrando a opositores y exreos políticos, a los que actualmente los acusan de posesión de drogas. Organizaciones de derechos humanos contabilizan más de 80 presos políticos en los diferentes sistemas penitenciarios del país. “Exijo la libertad de mi hermano, él es un hombre trabajador y dedicado a su familia, espero se respete su integridad y que lo liberen pronto”, concluyó María de los Ángeles Téllez, hermana del detenido.