La líder estudiantil e integrante del Movimiento Cambio Democrático Zayda Hernández, a través de una entrevista a Artículo 66, aseguró que la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD), es un «cascarón» controlado por los empresarios, a quienes tildó de ser «posibles colaboracionistas» del gobierno ya que «han demostrado que no quieren sacrificar nada» para lograr justicia y democracia para el país.
«Cuando tuvimos la oportunidad de que el país estaba trancado, que las universidades estaban atrincheradas, que todos estaban en las calles y exigimos un paro nacional indefinido para hacer presión a la dictadura, ellos se negaron», fustigó Hernández.
La activista aseguró que la Alianza Cívica debe de sufrir una reingeniería para que pueda contar con la legitimidad que algún día tuvo y ganó el respeto de los nicaragüenses. También, recordó que algunos banqueros y directivos de las gremiales empresariales que están integrados en la Alianza pagaron cabildeos para evitar que se aplicaran las sanciones derivadas de la ley estadounidense conocida como Nica Act.
Igualmente, insistió en que la Alianza Cívica tiene errores de comunicación que han salido a la luz y que la población ha criticado. “Pienso que se debe fortalecer otros grupos, como el Movimiento Campesino que está dentro de la Alianza que no tiene protagonismo y que ha sido relegado”, e insistió en que es necesario cambiar el rol que tienen los integrantes de esta institución.
https://www.facebook.com/Articulo66/videos/912062485891385/
Hernández, manifestó que la oposición nicaragüense debe de organizarse a nivel territorial y elogió el trabajo que ha venido realizando el Movimiento Campesino. Sin embargo, detalló que “aunque todos tengamos diferencias, diversidad de pensamiento tarde o temprano vamos tener que aglutinarnos porque es nuestra obligación para derrocar la dictadura”.
Nota relacionada: Alianza Cívica y la UNAB apuestan por reforma electoral «incluyente»
Finalmente, criticó a la Alianza Cívica y a la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), de quienes dijo que no tienen disposición ni una estrategia definida para salir a las calles. “No tienen una clara organización porque si hubiese (…) miraríamos una manifestación en distintos puntos de la capital en el mismo tiempo”.
Hernández se defendió de las críticas que la tildan de “divisionista” y “pagada por el régimen” de Daniel Ortega por cuestionar al liderazgo de la oposición. “Esa es una clara falta de tolerancia”, dijo la activista, quien además defendió que su organización denominada Cambio Democrático es un grupo de jóvenes universitarios, activistas y empresarios independientes. Hernández además aseguró que Cambio Democrático es económicamente autosostenible y que sus miembros trabajan en distintos sectores y aportan de sus propios recursos al activismo opositor que realizan.
Desde que Carlos Pellas en contubernio con el régimen decidieron reanudar el diálogo, ya estaba todo amarrado, desde que aceptaron negociar sin filtrar lo que se negociaba todo estaba amarrado, sino lograron concretar nada fue porque desde las cárceles los presos políticos se pararon fuerte y evitaron que se diera el chanchullo amarrado. Recordemos cuando arrastraron a Milton Arcea, el iluminado Carlos Pella salió leyendo un pronunciamiento diciendo que aquí se respetaba el estado de derecho y la propiedad privada. Recuerdan? Estos iluminados de la economía se van ahogar en la sangre con que están manchado sus capitales, son unos hipócritas que sólo piensan en el dinero. Por dinero son capaces de vender a sus propias madres. Ya le habían vendido el alma al diablo, o mejor dicho, a uno de los hijos del diablo, y a su hija, a Daniel Ortega Lucifer y a Rosario Murillo Demonios. Los asesinos criminales genocidas están creyendo que ya lograron el divide y matarás y esclavizaras al pueblo. Se equivocan.
Pido a Canal 10 que si es posible pasar ese vídeo de 2014, cuando la Alianza Público Privada estaban en su punto álgido de su luna de miel. Todo el capital de estos disque empresarios está manchado de sangre, porque desde mucho antes de 2018 se venía asesinando a los campesinos y se reprimía a quienes pedían la destitución del ladrón de Roberto Rivas.
Respecto a lo que opina Hernández, hay mucho de razón. A los empresarios en su tiempo no mostraron la beligerancia que dembieron tener. Ahora en la Alianza tampoco se les mira que hagan mucho.
Deben ver al pueblo boliviano, la tremenda decision que hizo este sector junto al pueblo que los militares vieron la lucha y se unieron. Es claro que son militares que aprecian la justa lucha y no están vendidos.