La jueza orteguista Adela Cardoza, del juzgado segundo de Managua, se declaró incompetente y suspendió el juicio en contra del preso político Gabriel Ramírez Somarriba, de 18 años, originario de Masaya, acusado de fabricar y detonar una bomba de contacto en la casa de una ciudadana del barrio San Jerónimo, de la Ciudad de Las Flores.
El juicio en contra de Ramírez se había reprogramado para este jueves, 24 de octubre, sin embargo, la jurista trasladó el caso a los juzgados de Masaya, mismo lugar donde el 15 de agosto la jueza Ruth Chamorro remitió el caso a Managua por considerarlo de trascendencia nacional.
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El acta emitida por Cardoza cita que “queda sin efecto la programación realizada por esta autoridad judicial (…). Todos los actos procesales se deberán cumplir en el juzgado de origen de la ciudad de Masaya. A partir de este momento se deberá de hacerse el respectivo registro en el sistema Nicarao, sobre el asunto específico”.
Por su parte, la abogada defensora de derechos humanos Yonarqui Martínez, defensa de Gabriel Ramírez, dijo a Artículo 66 que este caso ha incumplido lo establecido en la ley, ya que sobrepasó el período de 90 días para enjuiciar a un ciudadano. “La jueza no mandó a traer a Gabriel Ramírez, porque se iba a declarar incompetente. Esto es un proceso anómalo, porque mi defendido lleva 120 días sin ser juzgado”.
Según Yonarqui Martínez, no hay fecha para el próximo juicio en contra de Gabriel Ramírez, ni mucho menos se ha delegado a un juez para seguir con el caso del ciudadano. “Hay una violación inminente de derechos humanos en contra de Gabriel. Exigimos su libertad inmediata”.
Desde el 13 de junio, Gabriel Ramírez está secuestrado por la dictadura de Daniel Ortega, hasta el la fecha no hay una sentencia en su contra. Con la cancelación del juicio de este jueves, 24 de octubre, ya a es la cuarta vez que la justicia orteguista se niega a efectuarlo y la segunda que las juezas a cargo del se declaran incompetentes por considerarlo de trascendencia nacional.
