El grupo de trabajo sobre Nicaragua del Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), expresó su total rechazo al discurso brindado por el dictador Daniel Ortega el pasado 19 de julio, en el acto en celebración por el 40 aniversario de la revolución sandinista, donde expresó que no pretende regresar a la mesa de negociación con la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD).
También dijo que las elecciones serán hasta el 2021, lo que hace indicar que piensa seguir en el poder, pese a ser señalado por organismos internacionales de cometer delitos de lesa humanidad contra los nicaragüenses.
“¿El diálogo con quién? Con los campesinos, con los obreros, con los pequeños empresarios, con los artesanos, con los productores pequeños, medianos y grandes; con todos aquellos que estén dispuestos a trabajar por la paz y por la producción económica y social en este país. Ese es el único diálogo que tiene sentido”, dijo Ortega, quien además preguntó a la oposición: “¿Y qué quieren? ¿Que los barramos y después salgan diciendo que les robamos? sí, porque eso saldrían diciendo”, dijo confiado el tirano.
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El grupo de trabajo mostró su preocupación por el deterioro de las instituciones democráticas y los derechos humanos en Nicaragua, que continúan siendo violentados por la dictadura y su órgano represivo que comenzó una ola de secuestros a excarcelados políticos para luego incriminarlos por delitos comunes, entre ellos tenencia ilegal de armas y posesión de drogas.
“Dicha solución solo puede ser alcanzada mediante un diálogo efectivo y de buena fe, con señales claras de respeto a los derechos humanos, apertura al trabajo efectivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el avance en las reformas electorales, y el regreso seguro de los miles de nicaragüenses que se vieron obligados a abandonar su país”, expresa el grupo de trabajo de la OEA mediante un comunicado.
Alianza Cívica pide a la OEA la creación de la Comisión Especial
Por su parte la Alianza Cívica envió otra carta a la OEA solicitando de manera urgente la creación de la Comisión Especial para Nicaragua, recomendada por el organismo internacional para atender la crisis de Nicaragua. En ella detalla que esta comisión permitirá la reanudación del diálogo con el gobierno y el regreso de organismos internacionales como la CIDH.
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“El Grupo de Trabajo continuará insistiendo en la urgente necesidad de que se permita el ingreso de la CIDH y sus mecanismos, así como de otros mecanismos internacionales de derechos humanos, tal como lo resolvió la Asamblea General en Medellín en la resolución del 28 de junio de 2019 sobre “la situación en Nicaragua”, y en la necesidad de liberación efectiva y sin restricciones de todos los presos políticos”.
Por último la OEA instó al régimen orteguista a respetar la libre manifestación pacífica convocada por los diferentes movimientos sociales, asimismo condenó la instauración de un Estado policíaco en el país para reprimir a los autoconvocados. “El Grupo de Trabajo reprueba que se haya negado, una vez más, la autorización a la realización de una manifestación el 25 de julio y que las autoridades hayan realizado un amplio despliegue policial intimidatorio para quienes quieren ejercer su libertad de expresión, así como la represión a las pequeñas manifestaciones que, pese a ese despliegue, pudieron realizarse en distintos puntos del país”.