El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo sigue en plena campaña de ataques contra la Iglesia Católica de Nicaragua. “El 19 Digital”, órgano propagandístico del gobierno, publicó un “artículo de opinión” de Mario Barquero Baltodano, embajador de Nicaragua en Irán; bajo el título de “Pobre Iglesia Católica, Pobre Cardenal Brenes”, dónde acusa al líder religioso de ser “titubeante, errático” y hasta “engatusado”.
Los ataques mediáticos hacia la figura de Brenes son nuevos en los medios propagandísticos del régimen orteguista. Si hay algo que la dictadura había cuidado, hasta ahora, es que la campaña difamatoria contra la Iglesia Católica pasara de largo del el arzobispo de Managua; quién se ha caracterizado por su moderación.
“Los pecados de la soberbia intelectual, exhibicionismo y ambiciones personales; eufóricos se autoconvierten (sic) en heraldos de la violencia, la muerte, el caos, el crimen. Alientan, fomentan a desalmados asegurándoles que la iglesia los protegerá. Pisotean las enseñanzas de Cristo en cuanto al amor, a la noviolencia (sic), a buscar la paz”, señala el funcionario orteguista en el escrito, puesto en la sección de opinión del órgano de propaganda gubernamental.

Carlos Mikel Espinoza, periodista y ex editor de El 19 Digital, confirmó a Artículo 66 que los ataques vertidos por el embajador Barquero en dicho medio responden a un intento desesperado del régimen orteguista, de mostrar su frustración por no poder controlar o someter a la Iglesia Católica de Nicaragua, liderada por Brenes, a quien por años, Rosario Murillo, la “estratega” de la propaganda del régimen, pretendió endulzarle el oído.
“El hecho que “El 19 Digital” publique un artículo de opinión donde se ataque de manera virulenta, vulgar al cardenal Brenes; no es que el editor o el director decidieran por sí mismos aprobar esa publicación. En lo absoluto, ese tipo de artículos son aprobados directamente por Rosario Murillo”, dijo el periodista, asilado en Costa Rica debido a amenazas contra él y sus familiares.
Espinoza resaltó que el panfleto digital orteguista no trabaja de modo “autónomo”, sino que responde a los criterios editoriales que rigen a todos los medios de comunicación en poder de la pareja presidencial. Asimismo, señaló que la orden de atacar a Brenes proviene de Rosario Murillo.
“El 19 Digital no trabaja de manera aislada al resto de medios de comunicación del Frente Sandinista. El 19, no es que por sí mismo decidió romper una línea editorial y empezar a publicar cosas en contra del cardenal Brenes. El 19 es uno de los medios que está más controlado directamente por la compañera Rosario Murillo”, insistió el comunicador.
“Se echan de enemigos a muchísimos católicos”
Para el exeditor de “El 19”, durante once años, el régimen orteguista intentó guardar las formas hacia la Iglesia Católica, y en especial hacia el arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes; debido a que una escalada en contra de la jerarquía católica nicaragüense significaría ganarse la animadversión del pueblo, que mayoritariamente continúa profesando el catolicismo.
“Creo que uno de los principales factores que ha intervenido en que Rosario Murillo ordenara a sus medios de comunicación, evitar atacar al cardenal Brenes, evitar una confrontación directa con el cardenal e incluso, tratar de promover o facilitar un acercamiento con el FSLN, es porque el cardenal Brenes es una de las figuras más respetadas por todos los sectores de Nicaragua”, manifestó el periodista.
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También, otro de los factores que habría evitado un ataque directo de los medios de comunicación orteguistas contra el cardenal, es la cercanía del líder católica nicaragüense con el Papa Francisco. Al atacar al máximo jerarca católico –sostiene Espinoza-, se estaría “echando de enemigos” a la población que profesa su fe cristiana dentro de la Iglesia Católica.
“Rosario Murillo sabe que al momento de tocar al cardenal Brenes; se está echando de enemigos a muchos católicos. No digamos que a todos, porque hay muchos católicos, si se les puede llamar católicos; que apoyan estos crímenes cometidos por el Frente Sandinista. Y ahorita con estos ataques que está recibiendo el cardenal, vamos a ver a un pueblo católico respaldando a sus principales líderes”, opinó el periodista, quien laboró durante más de una década en el órgano de difusión del orteguismo.
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Para Espinoza, los ataques ordenados por Murillo contra el arzobispo Brenes son un “error” de “cálculo político” que le terminará, a la larga, de pasar factura al FSLN; y éstas acciones son “el principio del fin de un régimen que nos mantuvo en silencio a muchos nicaragüenses durante más de once años”.
El experiodista oficialista advierte que este “artículo de opinión” podría ser la punta de lanza de una andanada de ataques viscerales desde el aparato mediático del régimen orteguista contra el cardenal Leopoldo Brenes, ya que el mismo modus operandi fue utilizado cuando iniciaron los ataques contra Monseñor Silvio José Báez: Con un “artículo” del pastor evangélico Miguel Ángel Casco.
Manipulación encubierta de la figura del cardenal Brenes
Carlos Mikel Espinoza señaló que si bien no había una manipulación abierta de la figura del arzobispo Leopoldo Brenes; existía una línea de explotar las palabras del cardenal nicaragüense cuando sus declaraciones eran favorables para el régimen orteguista. Esto se realizó durante once años, y se acentuó cuando el jerarca católico fue nombrado cardenal por el Papa Francisco.
Esto consistía –según el periodista-, que los medios de comunicación bajo control de la primera dama, debían asistir a todas las eucaristías celebradas por el cardenal Leopoldo Brenes. Grabar toda la homilía y luego preguntarle temas de coyuntura al arzobispo al finalizar los oficios religiosos. Toda declaración crítica del arzobispo de Managua era censurada y toda declaración que expresaba algún punto de vista a favor del gobierno, utilizada en su máxima expresión.
“La estrategia mediática era bien fácil: No atacar. No entrar en conflicto por ninguna razón con el cardenal Brenes. Prácticamente todas las actividades del cardenal Brenes eran cubiertas por los medios del Frente Sandinista. Al momento de las homilías, estar atento de todo lo que él dijera y sacar provecho de cualquier cosa que pudiera favorecer al gobierno”, explicó el experiodista oficialista.
De este modo, continúa Espinoza, se mostraría a los católicos nicaragüenses que el FSLN estaba con el cardenal Leopoldo Brenes, y de esta manera, legitimarse utilizando la alta investidura cardenalicia del arzobispo de Managua.
“Esto quedó muchas veces en evidencia cuando al cardenal se le criticaba por tener ciertos favoritismo con el gobierno. En marzo de este año, cuando Rosario Murillo anunció que probablemente se iban a controlar las redes sociales en Nicaragua, una de las principales figuras que se buscó a través de los medios de comunicación del Frente fue al cardenal Brenes y las declaraciones del cardenal Brenes fueron muy explotadas a favor del Frente”, aseveró el comunicador, quién dijo que de este modo velado, se manipulaba al arzobispo de Managua desde los medios orteguistas.
Espinoza reiteró que tras el 18 de abril, hasta el mes de junio; las palabras del arzobispo Brenes fueron deliberadamente manipuladas por los medios de comunicación del régimen orteguista; cuidando censurar las declaraciones críticas del cardenal dónde hacía referencia a la represión por parte de las fuerzas de seguridad del Estado.
Incluso, la censura llegó al resto de obispos. La única voz “autorizada” por Rosario Murillo para emitir criterios en nombre de la Iglesia Católica, a través de los medios de propaganda gubernamentales era el cardenal Brenes.
“Todo lo que decía el cardenal que no favoreciera al gobierno era omitido. Era parte de la estrategia que se usó durante once años. Omitir todo lo que no convenía al gobierno”, dijo.
Cercanos a Brenes pasaban información a Rosario Murillo
Una revelación realizada en exclusiva por Carlos Mikel Espinoza, exeditor de “El 19 Digital” a Artículo 66 es que estrechos colaboradores del cardenal-arzobispo de Managua pasaban información sensible de éste último a la Secretaría del FSLN y también a sus órganos de propaganda mediática.
Para el periodista Espinoza, el FSLN utilizó distintas artimañas para intentar controlar aspectos de la vida pastoral de la Iglesia y de la agenda del arzobispo Leopoldo Brenes; por medio de colaboradores eclesiásticos que están ubicados estratégicamente cerca del cardenal.
“Dentro de la Iglesia Católica ha habido individuos que le han hecho daño a la Iglesia. Considero un buen grupo de personas le ha pasado información del quehacer de la Iglesia Católica, de algunos de sus obispos y sobretodo del cardenal Brenes”, subrayó Espinoza.
Según Espinoza, el FSLN llegó a manejar mejor que algunos miembros de la Curia Arzobispal, la agenda de visitas pastorales del arzobispo de Managua. Por este dato, -reseñó el periodista- los propagandistas gubernamentales sabían en qué parroquias estaría el cardenal Brenes.
“La agenda del cardenal Brenes era manejada por el Frente Sandinista con muchos días de antelación. Yo sí creo que hay gente cercana al cardenal Brenes que le facilita información al FSLN. Me atrevo a decir que hay gente que buscó como meter a allegados del Frente Sandinista dentro de la Iglesia Católica”, puntualiza el comunicador.
El exeditor del medio de propaganda del régimen orteguista manifestó que esto se puede corroborar de manera fácil; ya que hay fotógrafos oficiales de la pareja presidencial que también han sido vistos trabajando para eventos del arzobispado. “Quizá el cardenal no se daba cuenta que eso formaba parte de una estrategia más del FSLN”, enfatiza Carlos Mikel Espinoza.
Para Espinoza, para que reporteros oficialistas llegaran a tener unas relaciones y niveles de relación tan altos con el cardenal Brenes; alguien de adentro de la Iglesia debió facilitarle el acercamiento o servir de puente entre ambos personajes.
El experiodista, ahora desde el exilio, observa cómo ha cambiado la cobertura a los eventos del arzobispo, según los cálculos de la vocera del régimen. Desde que inició la masacre de abril y la Iglesia se ubicó del lado del pueblo, los órganos de propaganda gubernamental dan muy poca atención a la agenda de Brenes.
“Aquí es pura propaganda, no hay nada de ética periodística, nada de ajustarse a la verdad. Vas a mentir, vas a omitir lo que podás y vas a manipular lo que se pueda”, sería la orden que nadie se atreverá a cuestionar a “la compañera”, finalizó el periodista.
Aquí les va una información:
Uno de los infiltrados del FSLN en la Conferencia Episcopal es el vocero de la misma, un tal padre Winder Morales, quien hizo deslucir a la iglesia ante la opinión pública cuando oficiosamente negó al abogado Carlos Cárdenas Zepeda, quien fuera asesor de los obispos y fue secuestrado por los sicarios del régimen orteguiano.