[vc_row][vc_column][vc_column_text]Numas Pompilio Mercado Rodríguez nació un ocho de septiembre de 1925. Es un masatepino alegre y con facilidad hace amistades. A sus 92 años recuerda con pocos detalles el primer intento, del que fue partícipe, para derrocar a la dinastía de los Somoza, mejor conocido en Nicaragua como Olama y Mollejones.
Listo, con su camisa a cuadros, impecable, espera a una joven de quien le dijeron le interesaba su historia. Espera sentado en la sala de su casa. Casi no escucha, por su avanzada edad, pero lee perfectamente gracias a sus estudios y agudeza visual.
Mercado hace más de diez años que empezó a padecer de problemas en la pelvis y dejó de caminar. Ahora tiene que mantenerse en su silla de ruedas pero eso no le impide seguir conectado con el mundo. Todos los días hace que le compren su periódico. Desde hace más de setenta años vive frente al Parque Central de Masatepe, en un terreno que le heredó su padre, Cruz Mercado, en la única casa de dos pisos que queda en una de las calles principales de la ciudad.
El luchador se casó a los 24 años con Concepción Norori con quien procreó seis hijos, cuatro mujeres y dos varones; Julio Mercado de 63 años, Danilo Mercado de 61, Auxiliadora Mercado de 55, Concepción Mercado de 53, Fidelina de 52 y Claudia Lorena Mercado, que es quien lo cuida en su casa donde tiene una pulpería. Enviudó cuando tenía 53 años y su esposa 48.
Antisomocista desde niño
Don Pompilio cuenta que desde que tiene conciencia luchó contra los Somoza. Sus padres Cruz Mercado y Manuela Rodríguez fueron su ejemplo a seguir ya que no estaban contentos y entablaban conversaciones en las que despotricaban contra los abusos del somocismo.
“Mis padres y las amistades eran opositores a los Somoza, entonces yo pequeño oía y me integré (a quienes no querían más dictadura). Fui un anti somocista de primera calidad. Yo anduve contra los Somoza en Olama y Mollejones. Yo soy un veterano, no parece, ¿verdad?”, afirmó don Pompilio mientras sonreía.
Su carisma y poder de palabra fue lo que le ayudó a ser un eje fundamental en Masatepe. Aunque Pompilio Mercado no fue a la expedición militar que inició el 31 de mayo de 1959, cuando él ya tenía 34 años, en la que muchos nicaragüenses, entre ellos el periodista y mártir de las libertades públicas Pedro Joaquín Chamorro, intentaron darle un golpe final a la dictadura de los Somoza.
En ese intento lo que pretendían los nicaragüenses, entre ellos muchos campesinos, que no les gustaba el sistema de represión y autoritarismo de Somoza, era recibir uno de los primeros desembarques de armas y municiones a través de aeronaves que intentarían aterrizar de manera camuflada y sin riesgos en el Llano de Olama, ubicado al sur de Muy Muy, en Matagalpa y otro en Mollejones, en Santo Tomás, Chontales.
Sin embargo, nada en esa expedición sucedió como fue planificado. Los alzados en armas, inspirados en la recién ganada Revolución Cubana contra Fulgencio Batista, creyeron que correrían con la misma suerte. No obstante, fueron bombardeados, perseguidos por la Guardia de Somoza que al parecer ya tenía conocimiento del evento por lo que los interceptó y evitó ese golpe. El resultado fue unos cien muertos, aproximadamente.
Según narra el político Edmundo Jarquín, en el libro “Pedro Joaquín ¡Juega!”, Somoza estaba tan bien enterado de todo el intento en su contra que él mismo llegó a esperarlos “en guayabera blanca y con lentes oscuros; les ordenó voltearse, los insultó. Luego Somoza los exhibió en las calles de Managua”.
Don Pompilio no se enteró porque él no estaba en el campo hasta que escuchó en las noticias el fracaso de la misión. “Yo no tenía ningún cargo. Yo lo que hacía era reunir a toda esta gente de los alrededores (en Masatepe) y de Nandasmo, ellos eran conmigo. Yo daba una voz de alerta y la gente estaba conmigo. Entonces cuando hacían manifestaciones solo me decían necesito tanta gente y aquí yo le ponía seis camiones de gente. Yo iba a cierto lugar y decía necesito tanta genta para tal actividad en Managua. Yo cuando Olama y Mollejones, me avisaron que necesitaban gente y se me ofreció gente, fueron a Costa Rica a cabildear. Después, yo recibí órdenes de que no me moviera y que ya no siguiera mandando gente que luchara en el Frente Interno. Esa orden me la dio el difunto Róger Mendieta, originario de San Marcos, que hace poco murió. Con él era con quien yo me contactaba”, narró don Pompilio un poco perturbado por recordar la muerte de su buen amigo.
Tan activo fue en su la lucha contra la dinastía de los Somoza que Mercado fue encarcelado en varias ocasiones. Cuando la Guardia Nacional lo miraba reunido con otros lo capturaban solo por creer que estaba agrupando gente para alguna manifestación o golpe.
Fueron tantas las ocasiones en las que lo apresaron que a Mercado le cuesta recordar las fechas y la cantidad exacta en las que estuvo tras las rejas. “Yo luché bastante contra el somocismo. Yo estuve seis meses preso, en lo que le llamaban la Casa de Piedra que quedaba ahí en Managua en la Avenida Roosvelt. Yo he estado preso pero políticamente. A muchos torturaron pero a mí no me torturaron. Tortura moral por la presión pero físicamente a mí no me torturaron, no me golpearon. Trataron de sacarme información porque ya estaba formando un concejo de guerra encabezado por un coronel de Masaya (no recuerda el nombre) y ese me dijo vos invitaste a todos estos y nunca vas a volver a Masatepe. Son sentencias de un militar que pueden cumplirse” aseguró don Pompilio.
Gracias a la presión internacional para que se liberara a los presos políticos, don Pompilio fue uno de los liberados. Sin embargo, muchos se desanimaron por el intento fallido del golpe de Olama y Mollejones. “Cuando se disipó (la lucha contra Somoza que se había preparado en 1959) vinieron los jefes, Roger Mendieta, Pedro Joaquín y Luis Cardenal que eran los que dirigían, ahí no es que me haya retirado sino que ya no había aquel plan de lucha. Se disipó”, aseveró Mercador.
Daniel Ortega y Somoza, la misma cosa
Para este testigo y firme luchador del primer intento de revolución contra la dinastía de Somoza, actualmente, la lucha sigue por derrocar a una nueva dictadura con aires de dinastía. “Yo no lo hago porque estoy incapacitado, pero sigo con mi lucha (…) hablando de los Somoza y de Ortega como dice un poeta son la misma cosa, aquel fue un dictador y Daniel Ortega es un dictador (…) Los dos cometieron errores. Este señor (Daniel Ortega) está cometiendo errores y se los dicen pero no hace caso, entonces vamos a ver hasta dónde llega”, explicó indignado este excombatiente.
Su estado de salud no le impide seguir ideológicamente apoyando a quienes desean un país libre y democrático como el que el junto a Pedro Joaquín, Roger Mendieta, Luis Cardenal soñaron. “Si pudiera y hubiera movimiento para luchar contra la nueva dictadura yo me meto. Yo luché hasta donde pude contra los Somoza. Con este señor ya no me meto porque ya no puedo, solo ideológicamente”, lamentó don Pompilio Mercado.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]