Los exiliados y la diásporas de nicaragüenses en Europa y América se manifestarán en las principales ciudades del mundo como una forma de rechazo a lo que denominan «farsa electoral» de este próximo siete de noviembre, donde Daniel Ortega va por su cuarto mandato consecutivo y el segundo junto a su esposa Rosario Murillo. Los dos persiguen perpetuarse en el poder.
Esta jornada de protestas la llaman «la gran marcha mundial». Los organizadores han señalado que «los que están o estamos en el exilio y la diáspora nos movilizaremos por todas las ciudades del mundo, en repudio al fraude electoral y demandando la libertad de los presos y presas políticas, el retorno seguro de los exiliados y elecciones justas y verdaderas, por lo que reiteramos que desconocemos los falsos y prefabricados resultados que se darán a conocer».
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Con estas actividades, los nicaragüenses pretenden elevar la voz ante la comunidad internacional y llevar el mensaje en demanda de justicia, democracia y libertad para el país, demostrando el rechazo a unas «elecciones viciadas bajo las reglas de Ortega», refieren algunos opositores.
Las marchas en América se realizarán en Estados Unidos, México, El Salvador, Guatemala, Panamá, Costa Rica y Perú. En el continente Europeo se efectuarán en los países de España, Italia, Grecia, Irlanda, Bélgica, Suiza, Holanda, Austria, Francia, Alemania, Finlandia, Suecia, Noruega, Dinamarca y Reino Unido.
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Los exiliados han expresado que no existen las condiciones para unas elecciones en Nicaragua con más de 150 presos políticos entre los que se encuentran precandidatos presidenciales, la inhibición de partidos y la represión a opositores, antecedentes que «no dan garantías para un voto seguro». Los ciudadanos han expresado su inconformidad con los partidos que serán parte del «circo electoral», mismos que catalogan de «colaboracionistas o zancudos» del orteguismo.
«Es una forma de unidad, de trabajo en acción para decirle a la comunidad internacional que Ortega es ilegítimo, que Ortega no ha cumplido los acuerdos de la Organización de Estados Americanos (OEA), de los Derechos Humanos, no ha cumplido los acuerdos con las Naciones Unidas. Sigue encarcelando, sigue amedrentando y sigue persiguiendo ciudadanos en contra de las libertades públicas, la libertad de expresión y la libertad de pensamiento» afirmó recientemente a Artículo 66 el exiliado político Byron Estrada, miembro de la diáspora en Estados Unidos.