La exjefa de la Policía Nacional, Aminta Granera, reapareció el domingo, 28 de abril. Tras su salida de la institución, solo se habían tenido noticias suyas en julio de 2019 cuando esperó en la carretera a Masaya, en Managua, el paso de la caravana de El Repliegue para saludar a Daniel Ortega.
Granera, ese día, se ubicó en la calle a esperar el autobús Mercedes Benz que traslada al matrimonio dictatorial. Al divisarlo, le tiraba besos a la pareja presidencial. Posteriormente. fue vista en la Catedral de León en La Gritería.
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Después de esos dos eventos se desconocía información alguna sobre ella. Granera fungía como la jefa de la Policía en los primeros 10 días de la represión, del 18 al 28 de abril, cuando se conoció de forma extraoficial su renuncia al cargo que ocupaba desde 2006.
En el momento de su dimisión ya sumaban 46 asesinatos a manos de la Policía y paramilitares, que actuaban bajo el amparo de la institución que dirigía, según reportes de ese entonces del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), ilegalizado y confiscado en diciembre de 2018.
Aunque Granera habría renunciado en los primeros días de la represión estatal, fue hasta agosto de 2018 que el dictador Daniel Ortega habría aceptado su salida de manera oficial.
El comisionado general Francisco Díaz, consuegro de Ortega y Rosario Murillo, asumió la jefatura policial tras el retiro de Granera, aunque años atrás ya había tomado posesión de facto del cargo.
La nueva aparición de la exjefa policial, según videos y fotos publicadas en X, se dio en la boda de su hija Julia Dolores con el chinandegano Julio Callejas. El evento se realizó en Gran Pacífica, un resort de lujo en el municipio de Villa El Carmen, departamento de Managua.
En uno de los videos se aprecia a Granera con una banda de luz en la mano y bailando al ritmo de «Tití me preguntó» del trapero puertorriqueño Bad Bunny.
Denunciada por crímenes de lesa humanidad en Argentina
En noviembre de 2022, el Centro de Asistencia Legal Interamericano en Derechos Humanos (Calidh) interpuso una denuncia contra varios funcionarios de Nicaragua, incluida Granera, para que la justicia argentina investigue su grado de responsabilidad como directora de la Policía en Nicaragua durante la represión perpetrada en el estallido de abril de 2018.
«El accionar de la Policía Nacional durante la represión de abril de 2018 requiere de la investigación de la responsabilidad de la Sra. Aminta Granera Sacasa y, además, justifica la responsabilidad criminal del Presidente de la República de Nicaragua sobre los crímenes de lesa humanidad ejecutados por acción o por omisión a través de la Policía Nacional, de acuerdo con la denuncia oportunamente presentada», indica el documento de la ampliación de la denuncia.
CALIDH considera que Granera y otros funcionarios son responsables de planificar, dirigir y ejecutar diversas conductas sancionadas por el delito de lesa humanidad establecido en el artículo 7 del Estatuto de Roma, en el marco de ataques sistemáticos y generalizados contra la población civil.
«… pues cometieron los delitos de asesinato, exterminio, tortura, violación y otras formas de violencia sexual, desaparición forzada de personas, entre otras», señala la organización en una declaración pública.
