La vocera del régimen de Nicaragua, Rosario Murillo, informó que más de seis mil nicaragüenses fueron evacuados de las zonas de riesgos y trasladados a albergues o «casas solidarias» habilitadas a nivel nacional tras el paso de la tormenta tropical Bonnie el fin de semana. El fenómeno climático generó inundaciones y anegaciones en algunas ciudades.
«Más de 950 familias, es decir ,más de 4,000 personas fueron atendidas en 75 albergues temporales, también una cantidad de personas 2,295 en casas solidarias, 123 casas solidarias en 131 barrios y comunidades de los 10 departamentos y 26 municipios afectados como Rivas, Chontales, Madrid, Nueva Segovia, Masaya, Granada, Caribe Sur, Río San Juan, Caribe Norte y Matagalpa», detalló Murillo, en su intervención meridiana por los medios de comunicación oficialistas.
Asimismo, destacó que «gracias a Dios, no hubo daño humano que pueda atribuirse» al ciclón tropical, que con las lluvias intensas ha causado que los ríos se desborden a nivel nacional, ocasionando centenares de anegaciones.
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Rosario Murillo adelantó que el cinco de julio el Comité Municipal de Prevención Atención y Mitigación de Desastres (Comupred) y el Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred) presentarán un informe detallado de las afectaciones y estragos que generó la tormenta tropical en Nicaragua.
Municipio de El Rama, inundado
El Rama, ubicado en la Costa Caribe Sur de Nicaragua, es una de las zonas más afectadas por las precipitaciones que ha generado el ciclón tropical a su paso por el país. La zona tiene 16 puntos críticos y de ellos nueves barrios están afectados.
La alcaldesa del municipio, Rosa María Castillo, indicó que 122 familias fueron evacuadas y trasladadas a los albergues habilitados, tras el desborde del Río Escondido, que se encuentra con una altura de 8.88 metros.
«El municipio de El Rama a partir de los 6 metros se vuelve vulnerable sobre todo en barrios que son un poco bajos. Pero nosotros estamos con ellos acompañándolos y dándoles ánimos. Nosotros siempre les hacemos conciencia porque estos fenómenos no sabemos hasta donde nos pueden afectar», dijo la dirigente orteguista a los medios oficialistas.
Por su parte, Rosario Murillo sostuvo que en El Rama «donde el río crece y siempre genera inundaciones, anegaciones; los albergues estaban con familias que eran atendidas con todo esmero, con todo el respeto, con todo el cariño y con gran orden y eso nosotros nos hizo sentir tan bien porque sabemos que nuestro pueblo se siente bien».