Opositores a la dictadura de Nicaragua consideran que el cierre de la embajada de Daniel Ortega en Corea de Sur supone un acercamiento al régimen de Corea del Norte. Ese posible acercamiento del régimen Ortega Murillo aumenta el peligro que el dictador representa para la región centroamericana, afirmó Eliseo Núñez, analista político y secretario ejecutivo de Monteverde.
Núñez cree que Daniel Ortega es una amenaza para la región, independientemente de sus relaciones con Corea del Norte, pero lo es por sus relaciones con las dictaduras de Irán, Rusia y China.
«Esto solo viene a acrecentar este tipo de peligro que Ortega representa para la región y Estados Unidos. Lo que sucede es que Estados Unidos todavía no mira en Ortega una amenaza militar y por eso no lo coloca en la posición de urgencia de resolver el tema», indicó.
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El analista manifestó que todos los movimientos de Ortega indican que él se consolida como un «polo anti Estados Unidos» en la región y tiene un «efecto contagio» entre el resto de países.
Para el desterrado político y exaspirante presidencial, Juan Sebastián Chamorro, el cierre de la embajada nica en Corea del Sur y la eventual apertura en la del Norte es una «movida de alineación al eje del mal».
«El dictador de Corea le habrá dicho a Ortega que no podía tener ambas embajadas. Nicaragua aduce problemas financieros, mientras abre embajadas en Africa», escribió en X.
El exembajador de Nicaragua ante la Organización de los Estados Americanos (OEA) Arturo McFields elevó un llamado a los gobiernos de Costa Rica, Panamá y Guatemala a «preocuparse y ocuparse por la peligrosa cercanía de Nicaragua con Corea del Norte».
«Esto desestabiliza la seguridad regional. Es una grave amenaza para la prosperidad y la paz de Centroamérica», considera.
Para la disidente sandinista y desterrada política, Dora María Téllez, el cierre de la embajada de Nicaragua en Corea del Sur tiene que ver con China, es decir, los intereses comerciales, económicos y políticos del régimen de Ortega están completamente orientados a la conexión con la República Popular China.
«… esto lo hace retirarse de la relación con Corea del Sur y Taiwán, que ya fue hace un par de años. Además, evita ese gasto de delegación diplomática que no es de utilidad. El mercado principal que los Ortega Murillo quieren es China y la relación de naturaleza económica y política es con China», afirmó.
«En este momento el modelo comercial es básicamente que los chinos exportan a Nicaragua y no importan de Nicaragua. Las exportaciones nicaragüenses a China son pequeñas, mínimas. Los mercados principales de Nicaragua siguen siendo Estados Unidos y Centroamérica», agregó.
La opositora refirió que la relación político estratégica de Ortega «está cimentada» con China donde probablemente hayan otros intereses y que no ve mayor acercamiento con Corea del Norte.
«Siempre ha habido una relación y no veo que suceda ninguna amenaza para la seguridad (de la región). La relación con Rusia sí supone un problema porque los rusos se han metido en el ámbito de la seguridad y la defensa en Nicaragua; y esto sí es una cosa bastante más seria», concluyó.