El régimen de Nicolás Maduro liberó al creador de contenido Óscar Alejandro Pérez este lunes, primero de abril, después de haberlo arrestado en el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar, en Venezuela, por presuntas acusaciones de «actos relacionados al terrorismo».
Por medio de su cuenta oficial en la red social X, el youtuber publicó un mensaje para informar a sus seguidores que actualmente se encuentra «bien» y «en libertad». «En algunas horas a través de mi canal de YouTube contaré todo lo que pasó. Gracias a todos por su apoyo», agregó.
No fue una detención arbitraria
Aunque los organismos defensores de derechos humanos consideraron que el arresto del youtuber, quien estuvo detenido en las instalaciones del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) en la división de antiterrorismo, fue una «violación a la libertad de expresión», las autoridades chavistas insisten en que la detención del influencer estuvo fundamentada y «no fue arbitraria».
El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, dijo a los medios de comunicación de ese país que Pérez «al entrar al país es detenido, ha sido interrogado, se le han respetado todos sus derechos. Nadie puede inventar que fue una detención arbitraria».
El funcionario agregó que el youtuber «será puesto hoy mismo a las órdenes del tribunal correspondiente». De igual manera, Saab indicó que el joven venezolano debe estar «atento a los llamados del Ministerio Público y del propio Tribunal, en base a una investigación en curso, pero va a obtener su libertad».
Se presume que la causa por la cual Pérez fue detenido es por un comentario que realizó en uno de sus más recientes vídeos. El youtuber mostraba la torre de Credicard, ubicada detrás del Centro Comercial Chacaíto, en Venezuela.
«Como dato curioso, ahí están los servidores de todas las tarjetas de crédito y débito de Venezuela. Si le tiraran una bomba a ese edificio, se cae todo el sistema bancario nacional», fue lo expresado por el influencer.
Sin embargo, el fiscal general venezolano argumentó que «es un delito presentar la imagen de un edificio público o privado, sea cual fuese, cuya entidad final es prestarle un servicio público sin distinción al venezolano y a la venezolana, llamando o insinuando que habría que volarlo con una bomba».
Su video sobre Nicaragua
El tres de marzo, Pérez avisó en sus redes sociales que el primer vídeo de su serie «Así es la vida de Nicaragua en dictadura» ya estaba disponible en su canal. Durante una semana, el youtuber se encargó de recopilar la información sobre cómo los nicaragüenses sobreviven a diario a las dificultades económicas y sociales, causadas por la «mala administración» del gobierno actual.
Con cuidado de no revelar la verdadera finalidad de su documental, Pérez aterrizó en el Aeropuerto Internacional Augusto César Sandino, donde logró pasar el protocolo de seguridad de las autoridades migratorias del régimen. Los agentes policiales le pidieron que mostrara su identificación y sus respectivas redes sociales oficiales y, al igual que con su equipaje y equipo de grabación, le tomaron fotografías a todo.
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En el primer video, Pérez relató que visitó Managua y al grabar centros públicos no mencionó la palabra ‘dictadura’ en cámara o dijo opiniones negativas contra el actual gobierno. «Solo dentro de estas cuatro paredes de mi hotel es que me siento tranquilo y seguro para hablar sobre medios de comunicación», dijo el venezolano en el video que fue eliminado.
De igual manera, Pérez confirmó que en Nicaragua «no hay programas de opinión ni noticieros. «Todo está tranquilo en Nicaragua y eso me parece entre tantas cosas peligroso», declaró Pérez. Por seguridad, los comentarios críticos a su vídeo los grabó después de irse del país.