El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, en su afán de impedir que se divulgue la verdad sobre lo que ocurre en Nicaragua, mantiene una verdadera guerra cibernética, ejecutando todo tipo de ataques informáticos contra periodistas y medios de comunicación independientes, con el fin de bloqearlos y sacarlos del ciberespacio, denunció esta semana el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más.
En su reciente informe, «Ciberataques contra el periodismo independiente de Nicaragua», el organismo defensor que trabaja desde el exilio, advierte que, «los ciberataques (ejecutados por el régimen de Nicaragua) tienen como objetivo silenciar a la prensa independiente, limitando la libertad de expresión y la capacidad de los periodistas para informar de manera objetiva y crítica sobre las acciones del régimen Ortega-Murillo».
El monitoreo del Colectivo Nicaragua Nunca Más señala que la guerra cibernética que mantiene la dictadura incluye bloqueo de sitios web administrados por medios de comunicación independientes, además, hackeo de cuentas personales de comunicadores, suplantación de identidad y acoso en las redes sociales.
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El informe denuncia que la dictadura Ortega-Murillo realiza esas acciones «para impedir el trabajo de los medios de comunicación y del periodismo independiente que informan desde el exilio».
Los defensores de derechos humanos han documentado «decenas de denuncias» de ataques cibernéticos, a partir de 2018, cuando estallaron las protestas sociales demandando el fin de la dictadura, hasta la fecha. Ante tales ataques, las plataformas informativas optaron por reforzar sus espacios digitales «para que el país no quedara en la desinformación», sin embargo, advierte el organismo, «el régimen Ortega-Murillo ataca constantemente para evitar que la población obtenga información».
Guerra cibernética vulnera libertad de expresión y democracia
Ese acoso a través del internet contra la prensa crítica afecta la democracia, la transparencia y el respeto a los derechos humanos en Nicaragua, indica el informe y agrega que «la libertad de prensa y el acceso a información veraz son pilares fundamentales para el buen funcionamiento de cualquier sociedad democrática».
Entre las afectaciones resultantes de los ciberataques contra los medios, los defensores de derechos humanos destacan la restricción de la libertad de prensa y de expresión, desinformación y manipulación de la opinión pública, amenaza a la seguridad de periodistas, así como un severo impacto económico en los medios de comunicación atacados y el aumento de la autocensura.
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Entre los medios de comunicación independientes que han denunciado ataques cibernéticos para impedirles su trabajo informativo están Confidencial, 100% Noticias y LA PRENSA.
Uno de los casos relevantes, indica el estudio de la organización defensora es el de radio La Costeñísima, del Caribe Sur, que durante los últimos meses ha recibido al menos 36 mil 153 ataques maliciosos» que han sido bloqueados por su sistema de seguridad.