La Asamblea Nacional de Nicaragua, subordinada al dictador Daniel Ortega, aprobó el viernes, 22 de diciembre, la «Ley que establece la jerarquía de grados en las direcciones generales del Ministerio de Gobernación» mediante la cual supeditan a ese ministerio a las órdenes y control de la Policía orteguista y además convierte los grados de los bomberos, guardias penitenciarios, funcionarios de Migración y administrativos en grados policiales.
Con una votación unánime, los 91 diputados al servicio del régimen aprobaron sin mayores discusiones ni debate la Ley con la cual Ortega, prácticamente, desaparece al Ministerio de Gobernación (Migob), pues las dependencias de esa cartera: Dirección General del Sistema Penitenciario Nacional (DGSPN), la Dirección General de Bomberos (DGB), la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) y la Dirección General Administrativa, ahora se subordinan directamente a la Policía Nacional y los directores de cada una de esas direcciones ahora recibirán grados policiales.
El operador político de la dictadura, que funge como presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras, al justificar la aprobación argumentó que, las direcciones generales del Migob tenían sus respectivas leyes y diferentes grados, por lo que, supuestamente, el objetivo principal de la normativa, según el sancionado funcionario, es «compaginar sus escalafones en correspondencia a las diferentes direcciones de la Policía Nacional».
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La norma aprobada establece en el inciso 1 del artículo 2 que «el viceministro o viceministra ejerce la jefatura de todo el escalafón de las direcciones generales y es a quien se le asignará el grado de comisionado general».
Mientras, el inciso dos del mismo artículo establece que, el escalafón de comisionado o comisionada mayor le corresponderá a los directores de cada una de las direcciones del Migob y los comisionados o comisionadas serán los subdirectores de cada dependencia..
En tanto el inciso 3, del artículo 2, ordena que se incorporen los grados de capitán, teniente, subinspector, suboficial mayor y suboficial a para todas las direcciones generales.
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Y para poner fin al Migob que ha operado bajo su reglamento en los últimos 30 años, la ley aprobada por los parlamentarios oficialistas ordena, en su artículo 4 que «a partir de la entrada en vigencia de la presente ley, el Ministerio de Gobernación y todas sus direcciones generales forman parte integrante de la Policía Nacional».
De esa manera, Ortega le quita toda autoridad a la ministra de gobernación, pues prácticamente desaparece ese cargo al supeditar esa cartera a la Policía.
Antes del regreso al poder de FSLN, las fuerzas del orden se subordinaban al Migob, pero el caudillo sandinista, en su afán de poder, reformó la Ley de la Policía y la supeditó directamente a la Presidencia. Ahora revirtió los papeles ya que el Migob se somete a la Policía.
