Este viernes, 27 de octubre, se conmemora el Día Internacional de la Libertad Religiosa, declarada por la Organización de Estados de Estados Americanos (OEA), en su Resolución de Derechos Humanos.
Pese a que el objetivo de la declaración es para «proteger el derecho de todos a la libertad de pensamiento, conciencia y religión o creencia, lo que incluye la libertad de tener o no tener, cambiar o adoptar una religión o creencia de su elección y la libertad», en Nicaragua se ha violAdo este derecho, porque desde el 2018 la persecución contra la Iglesia católica se ha acrecentado por parte del régimen de Daniel Ortega.
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Según la IV entrega: ¿Una Iglesia Perseguida?, presentada el cuatro de octubre, por la abogada e investigadora Martha Patricia Molina, entre abril de 2018 y agosto de 2023, la Iglesia católica de Nicaragua ha sufrido 667 ataques, sin incluir las agresiones sufridas en septiembre y lo que va de octubre.
El informe refleja que solo entre enero y agosto de este año, se han documentado 205 hostilidades en contra de la institución religiosa por parte del régimen de Daniel Ortega, lo que refleja una subida considerable, respecto a los últimos cuatro años.
Saña contra la Iglesia católica
En la saña contra la Iglesia católica también se agregan las 3,240 prohibiciones de actividades de piedad popular, acciones, que, según Martha Molina, han sido institucionalizadas por la dictadura de Ortega, por lo que afirma que los sacerdotes tienen que tener prudencia para evitar se encarcelados.
En cuanto a los tipos de ataques y agresiones que ha sufrido la iglesia católica, la cuarta entrega del reporte indica que han ocurrido 117 asedios, impedimentos a templos y edificios religiosos, 39 cierre de organizaciones sin fines de lucro y medios de comunicación, proyectos y obras, 114 represiones a religiosos, 71 pintas y mensajes de odio.
Añade que al menos 151 religiosos se han visto obligados a realizar su misión pastoral fuera de Nicaragua, debido a que la dictadura de Ortega los ha expulsado, desterrado o prohibido el ingreso al país.
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El nueve de febrero de este 2023, 12 religiosos fueron desterrados a Estados Unidos, luego de estar presos por órdenes de la dictadura de Nicaragua; y el 15 del mismo mes se les despojó a otro grupo de religiosos su nacionalidad.
El 18 de octubre, la administración orteguista desterró hacia el Vaticano a 12 sacerdotes que mantuvo cautivos en las cárceles de Nicaragua o en el seminario por supuestos delitos comunes o por traición a la patria.
Solidaridad con religiosos
Tras la ola represiva en contra de la institución religiosa, la Alianza Universitaria Nicaragüense (AUN) manifestó que «en el Día Internacional de la Libertad Religiosa elevamos nuestras voces por la Iglesia perseguida en Nicaragua. ¡Que se respete nuestro derecho a la fe!».
Por su parte, la Coalición Nicaragua Lucha manifestó que «en este importante día llamamos la atención sobre la situación en Nicaragua y nos unimos en solidaridad y empatía, así como reflexión y resistencia para ser libres de creer y profesar nuestra fe».
A la vez, recordó que la libertad religiosa «tiene múltiples dimensiones y está interrelacionada con otros derechos humanos, como el derecho a la libertad de expresión o el derecho a la vida».