El jefe del Ejército de Nicaragua, el orteguista Julio César Avilés, aprovechó el acto de celebración por el 44 aniversario de fundación de las fuerzas castrenses para expresar su «lealtad, firmeza y cohesión» con los tiranos Daniel Ortega y Rosario Murillo y para lanzarse con todo, en insultos, calumnias y amenazas, contra el periodismo independiente.
Con evidente actitud revanchista y en tono incendiario, el jefe militar llamó «vividores y mercenarios de la información» a los periodistas y, sin aportar ni una sola evidencia, dijo que los comunicadores son «asalariados de intereses extranjeros», sin atreverse a mencionar a quién es el que supuestamente paga, ni quiénes son los periodistas que reciben esos «salarios».
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En la parte final de su intervención, Avilés, quien no paraba de sudar, cargó con amenazas y acusó a los comunicadores de haber pretendido, desde el 2018, darle un golpe de Estado al «gobierno legítimamente constituido», con lo que se suma al discurso propagandista de la dictadura Ortega-Murillo, quien ha hecho acusaciones de ese tipo para tratar de ganar credibilidad ante una comunidad internacional cada día más distante y quien ha acusado al régimen sandinista de ejecutar crímenes de lesa humanidad, y del propio Ejército de ser un órgano cómplice.
Daniel Ortega ordenó ascender al grado de General de Brigada al coronel de infantería Léster Vidal Gallo Sandoval, uno de los últimos oficiales de alta graduación fundadores del Ejército Popular Sandinista (EPS) de los años 80. Con estos ascensos Ortega sigue quedando con menos oficiales de la vieja guardia salida de las guerrillas sandinistas con edad para seguir ascendiendo.
Según el Acuerdo Presidencial número 177-2023, publicado en el Diario Oficial La Gaceta, del cuatro de septiembre, Gallo Sandoval recibirá su ascenso este mismo día en el acto central del 44 aniversario de fundación del Ejército de Nicaragua (EN) antes llamado Ejército Popular Sandinista (EPS).
El nuevo general de Brigada fungió como auditor general del Ejército hasta 2017, cuando fue relevado de ese cargo para ser nombrado jefe de la Secretaría General de la institución armada, donde se desempeña hasta ahora.
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El dictador Daniel Ortega otorgó este inicio de semana el quinto nombramiento de embajador, y sexto como diplomático, al controversial italiano nacionalizado nicaragüense Maurizio Carlo Alberto Gelli, a quien designó embajador concurrente de Nicaragua ante la República Eslovaca.
Según el Acuerdo Presidencial 173-2023, publicado en La Gaceta Diario Oficial número 162 de este cuatro de septiembre, Ortega nombra a Alberto Gelli embajador extraordinario y plenipotenciario de la República de Nicaragua ante el Gobierno de la República Eslovaca, en calidad de concurrente con sede en Madrid, España.
Dicho nombramiento, según el artículo 2 del mismo acuerdo, es efectivo a partir del mismo día de su publicación. Gelli ya había sido anunciado en ese cargo por la vicedictadora y vocera gubernamental Rosario Murillo, quien el pasado 30 de agosto informó a través de sus medios propagandistas que el italiano había recibido el plácet de parte de Eslovaquia.
Este es el sexto nombramiento diplomático que recibe Gelli de parte de Ortega, de ellos cinco son como embajador y uno como representante de Nicaragua ante la Organización Mundial del Turismo (OMT). El italiano tiene como sede la embajada de Nicaragua en Madrid, España, donde fue nombrado embajador el pasado 26 de noviembre de 2022.