Anunciada con bombos y platillos, la Embajada de China en Managua, que de paso ocupa un edificio robado por el dictador Ortega a Taiwán, parece Embajada «fachada», solo tres funcionarios de cierto rango tiene y ni siquiera le otorgaron facultades consulares. No se puede tramitar visas. Los orteguistas que viajan al país asiático deben ir a Panamá a tramitar sus visas, aunque la sede de Managua recomienda Costa Rica.
La tan aplaudida y aclamada embajada de la República Popular China en Managua, la «potencia mundial» con la que la dictadura Ortega-Murillo hace alardes de haber firmado acuerdos de cooperación y hasta, supuestamente, un Tratado de Libre Comercio (TLC), que arrancará en enero del próximo año, es pura «fachada».
Noticia relacionada: Dictadura Ortega-Murillo se alinea con golpistas de Níger porque forma parte de un bloque totalitario subordinado a Rusia
Todo viajero de Nicaragua que desee visitar China comunista tiene que ir a tramitar su visa a Costa Rica o a Panamá. En este último país lo hacen los delegados orteguistas que viajan al gigante asiático, tal como lo revela una periodista oficialista que narró para uno de los medios de la propaganda gubernamental, su «experiencia» en un viaje regalado a China.
No obstante, en el sitio web oficial de la Embajada China en Nicaragua, recomiendan a los posibles viajeros tramitar sus visas en Costa Rica. No mencionan Panamá.
La comunicadora María Noelia Aráuz, que trabaja para el oficialista Canal 4, narra que el pasado 24 de julio inició un viaje a China, y para ello voló primero de Managua a Panamá, en compañía de de su colega de Canal 8, a quien solo identifica como «Verónica», y lo revelador de su relato es que la escala en Panamá tuvo como fin «gestionar la visa» para China en la sede diplomática de ese país, en la nación canalera. Es decir, la comunicadora orteguista dice que la embajada china en Managua no tiene facultades consulares.
Los familiares de Erika Vanessa Reyes deberán pagar 8 mil euros para la repatriación del cuerpo de la joven que fue asesinada el pasado 31 de julio en Utrera, España. La Asociación Nicaragüense Sevilla-España, que apoya la repatriación de connacionales, inició una campaña para recaudar los fondos y enviar a la joven a su natal Nueva Guinea.
«Juntos podemos repatriar su cuerpo», este es el lema de la actividad gastronómica que se llevará a cabo el próximo 5 de agosto en la plaza Pío XII, en Utrera, para reunir el monto necesario para enviar el cuerpo de Erika a Nicaragua. La muerte de la joven conmocionó a toda la comunidad de Sevilla. Miembros de la Asociación señalan que autoridades del Ayuntamiento entregaron una suma de dinero para el pago de la repatriación.
Noticia relacionada: Embajada de la «gran potencia china» en Managua es pura fachada, ni visas a ese país tramita
Este jueves, 3 de agosto, el presunto responsable del asesinato de la joven de 22 años sería llevado a los juzgados para dar su declaración ante un juez. En Utrera, el 1 de agosto, un día después de los hechos, se decretó día de luto. Frente al Ayuntamiento se reunieron decenas de personas, entre estos familiares, amigos y vecinos de la nicaragüense, para dedicar un minuto de silencio por la muerte de la fémina. En el lugar las banderas fueron colocadas a media asta.
Los dictadores de Daniel Ortega y Rosario Murillo han dado la mayor evidencia de que están arrodillados ante Rusia y han subordinado por entero la política exterior de Nicaragua a los designios del Kremlin, así lo han demostrado con el reconocimiento como Gobierno a los militares golpistas que asaltaron el poder recientemente en Níger y tomaron como rehén al presidente de esa nación y a su familia, según analizan expertos consultados por Artículo 66.
El miércoles, 2 de agosto, Ortega y Murillo enviaron un mensaje de felicitación por «el día nacional de Níger» al general Abdourahamane Tchiani, el militar que encabezó un grupo de uniformados que el pasado 26 de julio asaltaron el poder en esa nación africana, tomaron como rehén al presidente constitucional, Mohamed Bazoum, y a su familia, a quienes aún mantienen encerrados en la casa presidencial.
Ese mensaje enviado por los Ortega-Murillo en el que además llaman «su excelencia» al general golpista, es un reconocimiento explícito al nuevo Gobierno de facto, y a la vez es una clara muestra de que los dictadores nicaragüenses han subordinado por entero su política exterior a las órdenes que emanan del Kremlin.