Monseñor Silvio José Báez escribió una oración dedicada exclusivamente por su hermano en la fe monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa y actual preso político del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua en el exilio realizó la plegaria durante la eucaristía del domingo, 16 de julio, desde la Iglesia Santa Agatha, en Miami, Estados Unidos.
Noticia Relacionada: «Monseñor Álvarez es inocente, es un profeta de Dios y debe ser liberado», exige el obispo Silvio Báez
«Señor y Padre Nuestro, Dios de la cosecha y de la siembra, Dios del amor, de la paz, de la justicia y de la libertad. Hoy queremos encomendar en tus manos a tu hijo, el siervo fiel, apóstol y profeta, Rolando, obispo de Cristo, quien está recluido en una inmunda cárcel de una dictadura criminal», oró el religioso.
Báez, quien desde el 2019 fue obligado a exiliarse para proteger su vida, continuó orando a Dios por el administrador apostólico de la Diócesis de Estelí. «Señor, ten piedad de Rolando y ten piedad de su pueblo. Te pedimos, Señor, que hasta la celda donde él está llegue la fuerza de nuestra oración como una brisa suave, como un consuelo fuerte», dice la oración.
También pidió por la salud, fortaleza y el «aumento de la esperanza» de monseñor Álvarez. «Sobre todo te pedimos que muy pronto veamos el milagro que solo de ti puede venir: que Rolando sea liberado incondicionalmente y pueda volver como obispo en medio del pueblo que la Iglesia le ha confiado», agregó el prelado.
Noticia relacionada: Monseñor Báez: «Nuestro pueblo sigue resistiendo, sin resignarse a la represión»
«Señor creemos en ti, creemos en el poder de la oración. Te pedimos por monseñor Rolando Álvarez en el nombre de Jesucristo y unidos a toda tu Iglesia en el mundo entero. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén», culminó el prelado.
Desde el encarcelamiento de monseñor Álvarez, el obispo Silvio Báez no ha cesado de demandar y exigir a la admiración orteguista su libertad inmediata y sin condiciones.
El 19 de agosto de 2022, Álvarez fue sacado a la fuerza por agentes policiales de la Curia Episcopal de Matagalpa, luego de estar, desde el cuatro del mismo mes, cercado por decenas de uniformados y paramilitares.
Actualmente, está cautivo en una celda de máxima seguridad del Sistema Penitenciario Jorge Navarro, conocido como «La Modelo», en Tipitapa, luego que el 10 de febrero fuera condenado a 26 años y cuatro meses de prisión por supuesta «conspiración a la patria».