Los diputados rusos aprobaron el martes una serie de enmiendas que agravan las penas contra delitos usados para reprimir a opositores, imponiendo en particular la cadena perpetua por “alta traición”.
El proyecto de ley, convalidado en segunda y tercera lecturas por la Duma (cámara baja), apunta igualmente contra quienes “ayudan a aplicar decisiones de organizaciones internacionales”, semanas después de que la Corte Penal Internacional (CPI) emitiera una orden de captura contra el presidente Vladimir Putin.
Los que lo hagan y ayuden a los “organismos gubernamentales extranjeros” podrán ser condenados hasta cinco años de cárcel.
Noticia relacionada: Putin firma ley que digitalizará la movilización militar en rusos
Según la organización rusa de defensa de los derechos OVD-Info, este artículo “muy amplio” podría aplicarse contra quienes “faciliten la ejecución de decisiones judiciales e investigaciones sobre crímenes de guerra”, cuando tropas rusas han sido acusadas de múltiples atrocidades.
La pena máxima por “alta traición” pasa de 20 años a la perpetuidad.
Un tribunal ruso condenó el lunes al opositor Vladimir Kara-Mourza a una pena de 25 años de cárcel, especialmente por “alta traición”, luego de un proceso a puerta cerrada.
Las enmiendas adoptadas incrementan las penas por crímenes relacionados con el terrorismo, a veces utilizados para reprimir a la oposición.
Por atentado terrorista la pena puede ser de hasta 20 años de cárcel, la complicidad hasta 12 y el apoyo de actividades terroristas hasta cinco.
La creación de una organización terrorista conlleva una pena de hasta 15 años de cárcel y el sabotaje de hasta 20 años.
© Agence France-Presse