El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), en el marco del quinto aniversario de la rebelión cívica de abril 2018, destacó que el pueblo de Nicaragua ha resistido de diferentes maneras y desde sus trincheras la brutal represión que ha mantenido en cinco años el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
El organismo, a través de un video publicado en Twitter, subrayó que Nicaragua ha resistido por la labor que han hecho los abogados defensores de continuar defendiendo los derechos humanos y acompañar a las víctimas dentro y fuera del país.
Asimismo, resaltó que la denuncia pública en espacios de libertad, los medios de comunicación independientes y redes sociales han permitido que los ciudadanos sigan exigiendo justicia y democracia para el país.
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El Cenidh, que se ha caracterizado por acompañar a las víctimas de la represión de la dictadura y denunciar sus atropellos, también precisó que el «litigio estratégico y la incidencia ante organizaciones internacionales de derechos humanos» han aportado a la lucha cívica y de resistencia de los nicaragüenses.
Agregó que los ciudadanos continúan resistiendo «desde las tortuosas cárceles de la dictadura, desde el exilio forzado y destierro; a través de la música, la poesía, la pintura y desde la fe ante el incremento de la persecución contra la Iglesia y sus sacerdotes».
«Con la solidaridad internacional mantenemos la esperanza de que volveremos a recuperar las calles, donde juntos marcharemos en libertad y democracia», resaltó el organismo.
La represión continúa
A cinco años de la rebelión de abril, la dictadura de Nicaragua no ha cesado su nivel represivo en contra de los nicaragüenses, pues continúan las detenciones arbitrarias, los destierros y el asedio en contra de opositores.
Recientemente, el dictador Daniel Ortega declaró el 19 de abril: «Día Nacional de la Paz», sin embargo mantiene tras las rejas a más de 40 presos políticos, incluyendo a monseñor Roland Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa.
El Monitoreo Azul y Blanco resaltó en un informe que, durante la segunda semana de abril, previo al aniversario de la rebelión cívica, la «represión estatal» se ha enfocado en los familiares de víctimas de abril, personas opositoras y autoconvocadas, así como a miembros de la Iglesia católica.
«Semana santa marcó un alza significativa en la cifra de incidentes en la que se contabilizaron al menos 25 hechos de control territorial, específicamente asedio policial a templos de la Iglesia católica. Pero la represión continuó en la semana previo al aniversario de abril», destacó.
En lo que va del mes de abril, el organismo ha registrado 27 detenciones arbitrarias, 25 incidencias de control territorial, 23 hostigamientos, 20 amenazas, 7 incidentes de represión migratoria, 2 confiscaciones, 2 allanamientos, 1 retención, 1 incidente de judicialización y 1 de tortura y tratos crueles.
