La vicemandataria de Nicaragua, Rosario Murillo, anunció que el Estadio Nacional de Béisbol, del cual retiraron el nombre del exjugador de Grandes Ligas Dennis Martínez, será reinaugurado y llevará por nombre «Soberanía» a partir del próximo 15 de diciembre.
«Estadio Nacional Soberanía, estará instalado este viernes a las 5 p.m. Invitamos a todos, nos convocamos a todos a participar de este momento, de dignidad y decoro nacional, de honra, gloria y victoria del pueblo nicaragüense, del pueblo de mujeres y hombres libres, trabajadores, dignos, brillantes, eso somos los nicaragüenses, las nicaragüenses, que vivimos con fe, en luz, en vida y en verdad», refirió la vocera gubernamental en su acostumbrada comunicación de mediodía.
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Añadió que es una «gran noticia, esta semana el día viernes, vamos a estar juntos, todos juntos, como vamos adelante, en la reinauguración, reinstalación, de un nombre que representa el sentido supremo de valor nacional, honor y gloria. sabemos, que es un nombre que nos reúne a todos, una palabra que nos reúne a todos, símbolo de lo que somos todos, Estadio Nacional Soberanía, a partir de ya, a partir de esta semana».
El pasado 23 de noviembre, el nombre de Dennis Martínez no solo fue quitado del exterior del Estadio, sino que, también fue eliminado de las cuentas de redes sociales del recinto y de la propaganda de los partidos. El régimen quiere borrar todo rastro de la máxima figura del béisbol nicaragüense en las Grandes Ligas. Martínez es miembro del Salón de la Fama del Béisbol Mundial.
La obra fue inaugurada el 20 de octubre de 2017, con la presencia del propio Dennis Martínez. El Estadio Nacional costó alrededor de 36 millones de dólares que fueron donados por el gobierno de Taiwán. Hasta ahora la iniciativa del propagandista orteguista solo se había quedado en sus aspiraciones.
Durante el estallido social, en abril de 2018, el Estadio Nacional fue utilizado como cuartel de los paramilitares y la misma Policía, quienes disparaban a manifestantes desde el coloso. Esto causó repulsión a la máxima gloria del béisbol nicaragüense. En junio de ese año, Martínez se rebeló contra la dictadura y exigió al régimen que dejara de asesinar a los ciudadanos desde el Estadio que lleva su nombre.
«Me duele saber que el estadio que lleva mi nombre se esté ocupando para fines de violencia, afectando a mis hermanos nicaragüenses», manifestó Martínez en ese momento.
