La analista política y periodista catalana Pilar Rahola recordó que en Nicaragua hay personas presas políticas y mencionó los casos de la activista Violeta Granera y la exaspirante presidencial Cristiana Chamorro, ambas rehenes de conciencia de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Rahola explicó que la dictadura Ortega-Murillo es un régimen que habla en nombre del pueblo de Nicaragua, pero que ese pueblo es perseguido y discriminado por la pareja dictatorial.
»Estamos hablando de una dictadura que habla en nombre del pueblo, pero discrimina y persigue al pueblo. La dictadura te mata, te persigue y te encarcela dos veces: cuando lo hacen y cuando los olvidamos», dijo la analista en un video publicado por Paula Bertol, exembajadora de Argentina ante la Organización de los Estados Americanos (OEA).
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Nicaragua atraviesa la peor crisis de violación a los derechos humanos, civiles y políticos de la población registrada en su historia moderna. El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo mantiene al país sumido en una crisis económica desde el 2018 a raíz de represión de las protestas sociales.
Organismos de derechos humanos internacionales han documentado graves violaciones a los derechos humanos en el país. El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) concluyó que en Nicaragua se cometieron crímenes de lesa humanidad.
En los últimos cuatro años más de 200 mil nicaragüenses han salido de Nicaragua al exilio en Costa Rica, ese número solo es de las personas que han solicitado refugio, pero la cantidad podría ser mayor. La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés) registró que 164 mil 600 nicaragüenses cruzaron irregularmente la frontera para ingresar a territorio norteamericano en el año fiscal 2022 que culminó en octubre pasado.
El Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas informó que el régimen de Ortega mantiene en las cárceles a más 219 personas presas políticas hasta finales de septiembre. El número podría ser mayor porque en el contexto electoral fueron apresadas 31 personas más.