Sin mayor sorpresa, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) se hizo con el control absoluto de las 153 alcaldías de Nicaragua y sepultó la autonomía municipal en estas cuestionadas votaciones del seis de noviembre. Según el primer informe del Consejo Supremo Electoral (CSE), dominado por Daniel Ortega y Rosario Murillo, el partido de Gobierno mantiene el control de las 135 comunas que le fueron asignadas en 2017 y «ganó» hasta en los municipios donde históricamente han sido liberales y están bajo la administración del colaboracionista Partido Liberal Constitucionalista (PLC).
El FSLN mantiene el control del poder local en las cabeceras departamentales de Rivas, Granada, Estelí, Matagalpa, Jinotega, Boaco, Juigalpa, San Juan de Nicaragua, Nueva Segovia, Madriz, Estelí, Chinandega, León y Masaya. Aún falta por conocer los resultados de las cuestionadas votaciones en algunos de los municipios de la Región Autónoma Costa Caribe Sur (RACCS) y Región Autónoma Costa Caribe Norte (RACCN).
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La plaza municipal más importante es Managua y le fue asignada nuevamente al FSLN con Reyna Rueda como alcaldesa y Enrique Armas como vicealcalde. Ambos ya gobernaban en Managua desde el periodo 2017-2021 y ahora les prorrogaron por un nuevo quinquenio. Según el reporte preliminar del CSE obtuvieron 272,787 votos, lo que significa un 72.86 %; PLC logra 43,653, 11.66 %; ALN 19,641 votos, 5.25 %; APRE 19,586 votos, 5.23 % y PLI 18,733 votos para un 5 %.
«La voluntad de la ciudadanía fue expresada en las urnas de manera transparente, democrática y en paz… el reconocimiento a la ciudadanía nicaragüense, al pueblo de Nicaragua, que acudió a esta fiesta cívica de elecciones soberanas municipales 2022», dijo la magistrada Brenda Rocha, presidenta del orteguista CSE, durante la lectura del primer informe preliminar.
En el departamento de Chontales le adjudicaron Comalapa, Juigalpa, La Libertad, San Pedro de Lóvago, Santo Tomás, Villa Sandino y San Francisco de Cuapa. San Pedro de Lóvago es otra de las municipalidades ocupadas de CxL y que ahora se la recetaron al FSLN en su deriva autoritaria para controlar el poder local. Algunas otras alcaldías designadas al partido de la dictadura son San Carlos, Morrito, El Almendro, San Miguelito y San Juan de Nicaragua.
En Nueva Segovia el oficialismo mantiene el control de las alcaldías de Jalapa, Santa María, Dipilto, Ocotal, Mozonte, San Fernando, El Jícaro, Murra, Quilalí. Murra es una de las comunas que era administrada por el ilegalizado partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), pero fue asaltada este año por el FSLN y ahora se la adjudicó el CSE.
En Masaya le designaron las alcaldías de Tisma, La Concepción, Masatepe, Nandasmo, Niquinohomo, Catarina y San Juan de Oriente. En Carazo: San Marcos, Dolores, Jinotepe, El Rosario, La Paz, La Conquista y Santa Teresa. Granada: Diriomo y Nandaime. En Rivas: Potosí, Buenos Aires, Moyogalpa, Altagracia, Tola, San Juan del Sur, San Jorge y Cárdenas.
Aunque el CSE no brindó detalles de la participación ciudadana, el observatorio Urnas Abiertas lo fijó en 17.33 %, mientras que la abstención fue del 82.67 % en todo el país. Las elecciones municipales se desarrollaron «bajo un absoluto control territorial», detenciones arbitrarias, presión a trabajadores del Estado, entre otras anomalías.
