La comunidad universitaria de las casas de estudios públicas serán «acompañantes electorales» en las votaciones municipales del seis de noviembre próximo, un proceso que ha sido catalogado como una «farsa» por la oposición.
La presidenta del Consejo Supremo Electoral (CSE), Brenda Rocha, y la presidenta del Consejo Nacional de Universidades (CNU) y rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua), Ramona Rodríguez, firmaron un convenio de cooperación para que los estudiantes universitarios participen en el proceso electoral.
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El acuerdo también establece que tras las votaciones el CNU preparará un «informe técnico» sobre las elecciones municipales que incluirá un acápite de recomendaciones. El CNU participa como «acompañante» de los procesos electorales desde las votaciones presidenciales de 2006, según publicaciones en su sitio web.
Ambas instituciones también acordaron que todos los recintos del CNU estarán a disposición del Poder Electoral y podrán servir como Centros de Votación o de cómputo el día de los comicios municipales.
«Esta participación va a contribuir a la cultura de paz, en la cultura de esa consolidación del proceso de la democracia y posteriormente como se hizo el año pasado en las elecciones del año 2021, el informe técnico que ellos nos brindaran con sus respectivas recomendaciones», afirmó la magistrada orteguista Brenda Rocha.
El CNU está conformado por las universidades públicas y confiscadas por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Está conformado por simpatizantes del partido de Gobierno, la misma situación que se registra en el CSE, todos los magistrados son militantes sandinistas o fueron electos por los diputados orteguistas.
La comunidad universitaria de las casas de estudio del CNU está bajo el mando de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN), un tentáculo del régimen para mantener el control absoluto de los jóvenes en la educación superior.
Mientras al CNU el CSE le permite todas las facilidades para «acompañar» las cuestionadas votaciones, a los organismos locales e internacionales de observación electoral los ha bloqueado para que no documentes las irregularidades que señalaron cuando sí pudieron estar en Nicaragua.