La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo suscribirá un acuerdo con la Federación de Rusia sobre la cooperación en el campo del uso pacífico de la energía atómica en Nicaragua, con el objetivo de incorporar la tecnología nuclear en el sector de la agricultura y la medicina en el país.
Mediante el acuerdo presidencial 151-2022, publicado este viernes, 21 de octubre, en La Gaceta, Diario Oficial, Ortega autorizó a la embajadora de Nicaragua en Rusia, Alba Azucena Torres Mejía, a que «en nombre y representación del gobierno de la República de Nicaragua» suscriba el acuerdo entre Moscú y Managua.
Rusia y Nicaragua tuvieron el primer acercamiento en materia de desarrollo de energía atómica en diciembre del 2021, en esa fecha, ambos países firmaron un «memorando de entendimiento entre la corporación estatal nuclear Rosatom y el Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua».
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El documento revela que Putin y Ortega «cooperarán» en el uso de la energía con fines pacíficos. A la fecha se desconocen los detalles de dicha cooperación.
Este memorando también fue firmado por la designada de Ortega en Rusia y el vice director general de la entidad rusa, Nikolái Spasski.
En agosto de 2022, Daniel Ortega ordenó por medio de un decreto la creación de la «Comisión Nicaragüense para el Desarrollo de la Energía Atómica con Fines Pacíficos».
El decreto especifica que esta comisión busca «promover el desarrollo y uso de la energía atómica para fines pacíficos», que estará enfocada en rubros como la agricultura, medicina, industria, ciencia, tecnología y vigilancia ambiental.
Además, el pasado 14 de septiembre, el hijo de la pareja presidencial, Laureano Ortega Murillo, se reunió con una delegación especial del gobierno de Rusia para abordar el desarrollo de la «energía atómica, con fines pacíficos» en Nicaragua, según medios oficialistas.
En el encuentro estuvieron presentes el embajador de Rusia en Nicaragua, Alexander Khokhólikov, y una delegación de la Corporación Estatal «Rosatom», que reúne a más de 350 empresas nucleares alrededor de todo el mundo y que su fin también está enfocado en el control de desarrollo de armas nucleares, de acuerdo con la descripción en su sitio web.
El régimen orteguista ha declarado ser un fiel aliado del gobierno de Vladimir Putin, y en los últimos años ha afianzado su relación con la federación rusa.