El régimen de Daniel Ortega sigue su arremetida contra sacerdotes nicaragüenses. Esta vez negó la entrada a su propio país al padre Deyvis López, párroco de la iglesia San Gregorio Magno, en Diriamba, Carazo.
Fuentes religiosas revelaron a Artículo 66 que el lunes, 17 de octubre, el sacerdote se disponía a regresar a su tierra, luego que estuviera por 15 días en Virginia, Estados Unidos, sin embargo, se le informó a través de la aerolínea, que Migración de Nicaragua había negado su ingreso, sin ninguna justificación.
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Amistades cercanas al religioso de 39 años afirmaron temer por su seguridad, porque en junio de 2018 —año de la rebelión cívica contra el dictador Ortega— el padre estuvo por tres horas detenido y creen que una vez más la dictadura lo quiera privar de su libertad por motivos políticos.
«El padre quiere volver, sin embargo tememos que si le permiten ingresar, lo quieran encarcelar debido a que su posición en defensa de los derechos humanos ha sido firme», subrayó el informante.


Ante la negativa del régimen de Nicaragua, el sacerdote Deyvis López informó al cardenal Leopoldo Brenes, sin embargo se desconoce la decisión o acciones que ha tomado la Iglesia ante esta medida represiva.
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El padre López tiene nueve años de ser sacerdote. Este medio de comunicación intentó comunicarse por vía telefónica con el cura, sin embargo no respondió.
Antes de esta acción, Daniel Ortega había negado la entrada a Nicaragua al padre Guillermo Blandón, párroco de la Iglesia Santa Lucía de Boaco.


Tras esta situación, el religioso manifestó que no hubo ningún argumento válido para negarle le entrada. «Nada de argumento me dieron, solo me notificaron que no tenía derecho de entrar a mi país», relató.
En este 2022, el gobierno de Nicaragua ha arreciado la represión contra la Iglesia católica, prohibiendo procesiones, encerrando y condenando a sacerdotes, además de mandar al exilio forzado a otros.
Hasta el momento son 10 religiosos detenidos, incluyendo a monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa, de quien se desconoce de forma oficial su paradero, su estado de salud y su situación legal.