Organizaciones defensoras de derechos humanos y políticas de Nicaragua manifestaron su preocupación por el estado de salud del preso político Miguel Mendoza, quien inició una huelga de hambre en demanda por ver a su hija Alejandra, de ocho años.
Para las entidades, una huelga de hambre «pone en riesgo la vida» del cronista deportivo, debido a que el reo de conciencia se encuentra deteriorado físicamente y ha perdido más de 30 libras de peso desde su detención el pasado 21 de junio de 2021.
Asimismo, los familiares del preso político se encuentran preocupados por su estado de salud, el que podría empeorar con el inicio de una huelga de hambre.
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El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) subrayó que hace más de 20 días en un «show mediático» el régimen exhibió a Mendoza, en donde el pueblo de Nicaragua logró confirmar «su deteriorado estado de salud y su extrema delgadez».
«Hoy nos preguntamos con terror ¿Cómo ha empeorado su condición física?», cuestionó el organismo defensor, en alusión a la huelga de hambre que está realizando el periodista Miguel Mendoza.
«Responsabilizamos al régimen Ortega Murillo y a la Dirección de Auxilio Judicial de lo que pueda ocurrirle», agregó.
Asimismo, la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) resaltó que en 15 meses de encierro la dictadura de Daniel Ortega le ha negado a Miguel Mendoza cualquier tipo de comunicación con su hija de 8 años.
«La vida de Miguel Mendoza está en peligro. El régimen le ha negado ver a su hija por más de un año y en su exigencia inició una huelga de hambre», escribió el bloque opositor en Twitter.
La plataforma Sé Humano le recordó al régimen orteguista que el preso político tiene «derecho a recibir visitas regulares de su hija menor de edad».
Además, le demandó a los Ortega-Murillo que le permitan al cronista deportivo y a los demás presos políticos poder «comunicarse regularmente con sus familiares tanto en Nicaragua, como en el exterior».
Miguel Mendoza es uno de los presos políticos a los que el régimen de Ortega-Murillo les niega el derecho de ver y comunicarse con su hija. Los familiares del reo de conciencia han solicitado de diferentes maneras se autorice la más mínima comunicación entre Miguel y su hija, sin embargo la administración de Ortega se ha negado a esta demanda.
El periodista fue detenido en su vivienda el 21 de junio de 2021. El régimen encarceló al cronista deportivo por supuestamente «conspirar para el menoscabo de la integridad nacional» y de «propagar noticias falsas». Fue condenado a nueve años de prisión. Además, fue inhabilitado para ejercer cargos públicos.
La primera y única vez que el régimen de Ortega mostró a Miguel Mendoza, el periodista lucía delgado, demacrado, al igual que los otros 26 presos políticos encerrados en «El Nuevo Chipote», sin embargo siempre mantuvo su frente en alto.