El Estado de Costa Rica pidió perdón este martes a Elena Téllez Blanco por violaciones a sus derechos humanos durante el periodo en que fue funcionaria de albergues infantiles y fue sometida a extensas jornadas laborales de 24 horas.
El viceministro para Asuntos Multilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Costa Rica, Christian Guillermet, expresó la disculpa pública del Estado como parte de la aceptación de las recomendaciones hechas en febrero pasado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) acerca de este caso.
“Los hechos que originaron su caso y sobre los cuales la Comisión Interamericana emitió un informe resultan reprochables, cargados además de marcados estereotipos de género que se tradujeron en una forma de violencia hacia su persona”, dijo el funcionario.
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Guillermet agregó que “en representación del Estado, con profundo respeto y humildad, se reconoce la responsabilidad por los hechos y le ofrezco una disculpa pública a usted y su familia por las afectaciones ocasionadas por la violación al derecho de igualdad y principio a la no discriminación, el derecho a la integridad personal, el derecho a la salud, al trabajo y a la protección judicial”.
El caso se remonta a 2003 cuando Téllez denunció ante la CIDH las extensas jornadas laborales en los albergues infantiles del estatal Patronato Nacional de la Infancia (PANI), donde mujeres llamadas “tías” se encargan del cuido de niños en condiciones particulares de abandono, abuso sexual, violencia intrafamiliar y discapacidad, entre otras.
Las jornadas de las “tías” son de 24 horas durante 11 días seguidos, que luego dan paso a tres días de descanso.
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El viceministro dijo que espera que el acto de reconocimiento público de la responsabilidad del Estado sea un primer paso para la reparación integral de la víctima y para que hechos similares no vuelvan a ocurrir.
Elena Téllez, de 78 años de edad, comenzó a Trabajar en el PANI en 1994 y se jubiló en el año 2010.
En el acto oficial estuvo presente la mujer, pero fue su hija, Luisa Berríos Téllez, quien tomó la palabra en su nombre para destacar la valentía y compromiso de su madre con la familia y con los niños que cuidada en su trabajo.
“Hoy es un día sumamente especial y relevante para mi familia y un espacio de reflexión en la historia del país”, expresó Berríos.
El Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil), que ejerce como representante de la víctima en el caso, ha señalado que la jornada laboral que cumplió Téllez es “incompatible con estándares internacionales; el derecho a la integridad personal, el derecho a la salud, el derecho al trabajo, así como el derecho a la protección judicial”.
“Este caso representa una oportunidad para que el Estado costarricense adecue la legislación interna para asegurar que el régimen laboral de las personas auxiliares de servicios infantiles sea compatible con los estándares internacionales”, agregó el Cejil.
La organización aseguró que este tema cobra especial relevancia en momentos en los que en Costa Rica se discute una iniciativa de ley que pretende avalar las jornadas laborales 4-3, es decir, 4 días laborales con jornadas de 12 horas, y tres días de descanso.
