Tras su exilio forzado, el editor en jefe del diario La Prensa, Eduardo Enríquez, lamentó que en Nicaragua se esté arrebatando el derecho a trabajar a los periodistas, ya que el régimen de Daniel Ortega se ha encargado de criminalizar esta labor y dar persecución a quienes la ejercen y no divulgan el discurso del oficialismo.
El periodista indicó a la Voz de América (VOA) que el personal del periódico más antiguo de Nicaragua «está enfrentando momentos muy difíciles», debido a que reporteros, fotógrafos y personal administrativo salieron obligados del país de un día para otro, ante la persecución del régimen contra ellos por el simple hecho de ejercer su labor.
«Nuestro personal está enfrentando momentos muy difíciles. Salir del país de un día para otro, muchas personas que ya lo han experimentado lo podrán entender, otras personas que no han experimentado se podrán tal vez imaginar lo difícil que es, que un día estás en tu casa, con tus hijos. con tu padre, amanecer tranquilo trabajando y luego en la noche tener que salir a esconderte; y al día siguiente tener que ver cómo salir del país sin ser capturado por simplemente trabajar», lamentó Enríquez.
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La Prensa, con casi 100 años de existencia, es uno de los diarios, ahora solo en formato digital. más críticos a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Eso le ha valido represalias desde que Ortega regresó al poder en 2007, quien desde entonces ha intentado silenciar al medio de comunicación.
A raíz del estallido social en abril 2018, el dictador sandinista elevó la persecución hacia los periodistas que no son a fin a su gobierno y fue cuestión de tiempo para que la justicia «fabricara acusaciones» contra La Prensa, afirmó el editor en jefe.
En 2021, el diario quedó únicamente con la edición digital debido a que el gobierno bloqueó la entrada de materia prima y en ese mismo año sus instalaciones fueron tomadas por la policía orteguista. También fue detenido arbitrariamente su gerente general Juan Lorenzo Holmann y condenado luego a nueve años de cárcel por el supuesto delito de lavado de dinero, bienes y activos.
Durante esa arremetida del régimen contra La Prensa «salieron del país otros editores del diario porque era evidente que las acciones iban en contra de nosotros, pero los reporteros y fotógrafos continuaron trabajando, así como el personal de redacción y administrativo», aseguró Eduardo Enríquez a VOA.
Asimismo, con «esta nueva oleada de represión en la cual han arrestado a dos miembros de nuestro equipo (dos conductores)», La Prensa decidió sacar a todo el personal de la redacción, resaltó el periodista.
El pasado 21 de julio, el medio de comunicación informó que periodistas, fotógrafos, editores y otros trabajadores del diario se vieron obligados a salir irregularmente de Nicaragua.
Régimen de Ortega encamina a Nicaragua hacia el totalitarismo
Eduardo Enríquez también alegó que la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo están llevando al país «hacia una situación totalitaria que no solo se expresa en el exilio forzado de todo un medio de comunicación que es, digamos, el decano e históricamente ha sido el medio de comunicación más crítico con todos los gobiernos».
Destacó que La Prensa tuvo que cerrar sus labores en el pasado por otros «regímenes, incluyendo la primera versión del sandinismo en los años ochenta, y el somocismo antes que ellos», pese a ello sus instalaciones nunca habían sido tomadas y «nunca se había visto esta situación de tener que sacar a toda la redacción del país para poder continuar trabajando».
El editor en jefe del diario hizo un llamado a los «países de América y el mundo» a poner los ojos en lo que ocurre en Nicaragua. «Tienen que darse cuenta de que este no es un gobierno, esto es un régimen autoritario, totalitario mejor dicho, en poder de un grupo de criminales».