La Policía detuvo este viernes fuera del Capitolio de Estados Unidos a un hombre que se había identificado falsamente como un agente de la Interpol y que llevaba consigo una gran cantidad de balas, aunque no tenía pistolas para dispararlas.
En un comunicado, la Policía del Capitolio identificó al detenido como Jerome Felipe, de 53 años y originario de la localidad de Flint (Michigan).
Según las autoridades, poco antes de las 5.00 hora local (9.00 GMT), uno de los agentes de la Policía del Capitolio comenzó a hablar con Felipe, que había aparcado su vehículo cerca del conocido como Monumento de la Paz, al oeste de la sede parlamentaria.
Felipe, un policía jubilado de Nueva York, entregó a los agentes una placa falsa que tenía impresa la frase “Departamento de la Interpol” y aseguró que era un detective de esa organización internacional.
Acto seguido, los agentes procedieron a inspeccionar su vehículo, donde encontraron varios cargadores con capacidad para numerosas balas, una pistola de balines y dos chalecos antibalas.
Noticia relacionada: Biden culpa del asalto al Capitolio a Trump, sus “mentiras” y su “ego herido”
No hallaron, sin embargo, ninguna arma de fuego para disparar la munición.
La Policía está todavía intentando determinar por qué Felipe había estacionado fuera del Capitolio de EE.UU.
El detenido se enfrentará a cargos criminales por la posesión ilegal de munición y cargadores de alta capacidad, detalló la Policía del Capitolio en su comunicado.
Exasesor de Trump, imputado por la vía penal por desobedecer al Capitolio
Peter Navarro, uno de los asesores del expresidente de EE.UU. Donald Trump (2017-2021), fue imputado este viernes por la vía penal con dos cargos de desacato al Congreso al haber rechazado colaborar con el comité que investiga el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021.
Navarro, de 72 años, ha sido arrestado y se espera que esta tarde comparezca ante la corte federal del distrito de Columbia, donde está previsto que se formalicen los cargos en su contra.
Está acusado de dos delitos de desacato al Congreso: el primero por negarse a responder a una petición para testificar ante el comité de la Cámara Baja que investiga el asalto al Capitolio y otro por no entregar a ese ente unos documentos que le había solicitado, detalló el Departamento de Justicia en un comunicado.
Cada cargo de desacato al Congreso acarrea una pena mínima de 30 días y un máximo de un año en la cárcel, así como una multa que podría llegar a 100.000 dólares.
Noticia relacionada: “Bisonte de QAnon”, condenado a casi cuatro años de cárcel por asalto al Capitolio
Navarro se negó a colaborar con el comité que investiga el asalto al Capitolio con el argumento de que Trump invocó la doctrina del “privilegio ejecutivo”, lo que significa que no pueden divulgarse sin su permiso ciertas informaciones.
Trump se ha escudado en ese “privilegio ejecutivo” para impedir que salgan a la luz documentos relacionados con el asalto al Capitolio, pero varios jueces han considerado que no goza de ese derecho porque ya no está en la Casa Blanca.
Según figura en el escrito de acusación, hecho público este viernes, el comité que investiga el asalto al Capitolio envió a Navarro un requerimiento para que testificara en febrero, pero el que fuera asesor de Trump se negó a cumplir con esa petición.
La acusación contra Navarro por parte de un gran jurado llega después de que en abril la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, aprobara una iniciativa para recomendar al Departamento de Justicia que declarara en desacato a Navarro y a Dan Scavino, otro exasesor de Trump.
El Departamento de Justicia fue el encargado de convocar a un gran jurado, una figura usada en EE.UU. para casos especialmente polémicos.
Navarro es el segundo asesor del exmandatario acusado por un gran jurado federal de desacato al Congreso.
El primero fue Steve Bannon, acusado de otros dos cargos por desacato al Congreso y que está inmerso en un proceso penal que podría tardar años en resolverse, aunque mientras tanto se le ha retirado el pasaporte para evitar que se fugue del país.
El comité que investiga el asalto al Capitolio fue creado por la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, y está formado por una mayoría de congresistas demócratas, aunque hay dos integrantes republicanos -Liz Cheney y Adam Kinzinger- que están enfrentados con Trump.
El 6 de enero de 2021, unas 10.000 personas -la mayoría simpatizantes de Trump- marcharon hacia el Capitolio y unas 800 irrumpieron en el edificio.
Cinco personas murieron y cerca de 140 agentes fueron agredidos.