El presidente de Chile, Gabriel Boric, reiteró desde Argentina sus fuertes críticas a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua, asegurando que su gobierno defenderá los derechos humanos en el continente sin importar el signo político del país que los vulnere.
«Me parece que la represión que hay en Nicaragua a los opositores al régimen de Ortega es absolutamente inaceptable…», dijo Boric en entrevista con Infobae desde Buenos Aires, donde el líder izquierdista chileno visitó a su homólogo argentino Alfredo Fernández.
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El mandatario también lamentó que las situaciones de Nicaragua, Venezuela y Cuba sean utilizadas por algunos sectores para atacar a los gobiernos de sus propios países, enfatizando en que las violaciones a los derechos humanos son un tema universal.
«Veo con irritación como en cada país se trata de utilizar las crisis de derechos humanos en otros países para hacer política interna y finalmente pareciera que le importa un carajo el compañero dirigente estudiantil que está sufriendo en una cárcel en Nicaragua, lo que les importa es tratar de hacer un punto en la política interna para tratar de pegarle al gobierno de turno”, puntualizó el mandatario, que en su visita a Argentina lamentó que los periodistas preguntaran únicamente por Nicaragua, Venezuela y Cuba cuando en otros países latinoamericanos también hay violaciones a los derechos humanos.
Boric señaló con claridad que las últimas elecciones generales celebradas en Nicaragua carecían de toda normalidad democrática. «Me parece que las últimas elecciones en Nicaragua no cumplen ningún estándar democrático», subrayó. De esta manera, el líder izquierdista reiteró lo que había dicho desde antes de ganar la elección presidencial.
No retroceder, no doble estándar con Nicaragua
Dos días antes de su llegada a Argentina, Gabriel Boric criticó a parte de la izquierda latinoamericana a la que le pueda afear sus cuestionamiento al régimen nicaragüense de Ortega-Murillo y reiteró que para ser creíbles, las fuerzas progresistas de América Latina deben condenar las violaciones a derechos humanos sin importar si lo cometen o no gobiernos afines.
«Lamento esa polémica, pero yo creo que la izquierda para poder presentarse ante el mundo tiene que tener una postura inequívoca y un solo estándar en materia de respeto a los Derechos Humanos. No puede ser que cuando los Derechos Humanos son vulnerados por gobiernos que se consideran afines, miremos para un lado y cuando son vulnerados por gobiernos que consideramos adversarios, pongamos el grito en el cielo», explicó el mandatario al periódico Página 12 de Buenos Aires.
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Boric, quien representa la denominada nueva izquierda latinoamericana explicó que sus críticas a la dictadura nicaragüense no van a retroceder mientras el gobierno de Managua siga su deriva autoritaria.
«Para que sea creíble nuestro compromiso debemos tener el mismo estándar y, claramente, lo que ha sucedido en Nicaragua donde las últimas elecciones se dieron con una parte importante de los candidatos de la oposición presos y ya no solamente los candidatos de oposición, sino figuras históricas como Dora María Téllez o el caso de Sergio Ramírez, un perseguido que no puede entrar a Nicaragua. Es sencillamente inaceptable y por lo tanto yo ahí no voy a retroceder en mi postura», enfatizó el presidente chileno.