El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) denuncia la «farsa judicial» en contra de la periodista Cristiana Chamorro y su hermano Pedro Joaquín Chamorro, quienes serán acusados este tres de marzo junto a los extrabajadores y exdirectivos de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH). Denuncian que todos son inocentes y piden que «se les libere de inmediato».
La aspirante presidencial y su hermano son acusados por los delitos de gestión abusiva, falsedad ideológica, apropiación y retención indebida y lavado de dinero, bienes y activos. Los otros imputados son los extrabajadores del área contable de la Fundación, Marco Fletes y Walter Gómez, así como el chofer de Cristiana, Pedro Vásquez. Este jueves Cristiana y Pedro Joaquín Chamorro serán procesados junto a tres trabajadores de la Fundación Violeta por supuesto lavado de dinero
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Según algunas encuestas, Cristiana Chamorro se había alzado como una de las favoritas para arrebatarle a través del voto popular la Presidencia de la República a Daniel Ortega. Después de que la periodista expresó públicamente su intención de ser candidata presidencial y competir contra Ortega en las elecciones generales de noviembre de 2021, la dictadura movió todas sus fichas y el aparato estatal para abrir una investigación contra la opositora y la FVBCH.
El Cenidh exige al régimen que «se libere de inmediato» a estos presos políticos, pues afirman que estos juicios son una «nueva sesión de torturas» en contra de los opositores. En reiteradas ocasiones la organización ha afirmado que la detención de los hermanos Chamorro se trata de un «caso fabricado, lleno de subterfugios y nulas investigaciones, ha demostrado la falta de independencia del Poder Judicial, sustituido por un grupo de personas sometidas y subyugadas a cumplir órdenes precisas de la dictadura, que sigue hilando sus mentiras e involucrando a más gente en delitos inexistentes, a manera venganza política».
Walter Gómez y Marco Fletes, ambos trabajadores administrativos de la Fundación, fueron detenidos la noche del 28 de mayo, a pocos meses de las elecciones generales, la dictadura ordenó capturar a todos sus críticos y silenciar las voces disidentes, incluidos siete aspirantes presidenciales y líderes de la oposición.
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Chamorro fue detenida el dos de junio en su casa bajo arresto domiciliario; Pedro Vásquez, el chofer de Cristiana, fue apresado el 15 de junio, ha perdido 35 libras de peso y su familia ha calificado como un «calvario» el encierro. La esposa de Vásquez dijo a Artículo 66 que «solo por ser el conductor de confianza de Cristiana (Chamorro) está detenido, porque yo siempre he dicho que si lo echaron preso por tener dinero, pues él no tiene dinero. Esto es injusto», dijo.
El pasado 24 de agosto de 2021. la Fiscalía amplió la acusación contra Chamorro e incluyó a sus hermanos, los periodistas Pedro Joaquín Chamorro y Carlos Fernando Chamorro, este último en el exilio por fuertes amenazas de detención en su contra. A Pedro Joaquín Chamorro Barrios lo señalan por los delitos de gestión abusiva y apropiación y retención indebida.
Ante esto, el Cenidh ha denunciado «venganza política en su contra» debido a que sus apellidos has estado ligados a la historia de la democracia en el país. Su mamá, Violeta Barrios de Chamorro, fue presidenta de Nicaragua (1990-1997) conocida como “la dama de la democracia”, acabó con la guerra e instaló la paz; su papá fue Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, el director mártir del diario La Prensa, el más longevo del país. Chamorro Cardenal fue asesinado en 1978.