Miembros de la Unión Democrática Renovadora (Unamos) en Costa Rica protestaron este tres de febrero para denunciar los «juicios amañados» llevados a cabo por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo contra los reos de conciencia que se encuentran, en su mayoría, en la Dirección de Auxilio Judicial en Managua conocida como «El Nuevo Chipote».
«La principal demanda del plantón fue la libertad de los presos políticos, rechazar y denunciar ante la comunidad internacional la barbarie que está cometiendo la dictadura de los Ortega-Murillo al hacerles una farsa de juicios dentro del mismo sistema penitenciario donde los torturan, donde los encierran, donde los matan de hambre», afirmó la directiva de Unamos, Dulce María Porras, al ser consultada por Artículo 66.
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Porras señaló que el régimen se encuentra condenando a los opositores «como que ellos van a estar toda la vida en el poder, se les olvida que ya van de salida». Recalcó que las personas presas políticas llevan meses sufriendo torturas, hambre y frío
Porras destacó la situación de las presas políticas denunciando que «esas mujeres que han sido juzgadas en estos días, ayer (dos de febrero) Ana Margarita Vijil y la doctora Ana María Oviedo que son defensoras de derechos humanos y Dora María (Téllez) que es una gran luchadora defensora de derechos humanos conocida internacionalmente por plantarle cara a las dos dictaduras que hemos tenido en estos últimos años. Las están castigando por levantar su voz contra los que no tienen voz», expresa la opositora.
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Desde el primero de febrero, después de tres meses en «receso», la dictadura decidió que los procesos penales fueran retomados por los jueces afines a los intereses de la pareja dictatorial. La mayoría de los detenidos son acusados de violar la Ley 1042, Ley Especial de Ciberdelitos; la Ley 1050, Ley de Soberanía; el Código Penal de Nicaragua y la Constitución Política de la República.
Mediante el plantón también solicitan a la comunidad internacional exigir al régimen la liberación de los presos políticos en el país que se encuentran siendo castigados mediante estos «juicios amañados» solamente por ser voces críticas al gobierno, sin permitirles siquiera el derecho a la defensa. Además, aseguran que «vamos a continuar realizando estas actividades actividades mientras el régimen continúe enseñándose con nuestra gente».