El régimen de Daniel Ortega destituyó a su embajador en Cuba, Sidhartha Francisco Marín Aráuz. El nombramiento quedó sin efecto después de estar en el puesto únicamente doce días. Marín fungió como asesor presidencial para políticas y asuntos internacionales de Nicaragua.
La dictadura resolvió «dejar sin efecto el nombramiento del compañero Sidhartha Francisco Marín Aráuz, en el cargo de embajador extraordinario y plenipotenciario de la República de Nicaragua ante el Gobierno de la República de Cuba», según el acuerdo presidencial 204-2021 publicado en La Gaceta este seis de diciembre.
Noticia relacionada: Nicaragua cambia a su embajador en Cuba después de casi 15 años
Marín Aráuz había sido nombrado desde el 24 de noviembre como el sucesor de Luis Cabrera González, el primer y único embajador que Daniel Ortega ha designado en el cargo desde el 2007, año que regresó al poder y restableció relaciones con la Isla.
El ahora defenestrado fue representante permanente de Nicaragua con rango de embajador extraordinario y plenipotenciario ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), según el acuerdo presidencial 125-2018.
También fue embajador de Nicaragua en Ecuador, agregado cultural con funciones consulares en Perú, concurrente en Bolivia, Ecuador y Paraguay. También encargado de los temas políticos, protocolares y comerciales. Posteriormente asumió la embajada de Perú como encargado de negocios.
Cuba y Nicaragua han fortalecido sus relaciones diplomáticas desde el regreso de Daniel Ortega al poder en 2007, cuando en el país se instauraron los gobiernos liberales no había embajador en La Habana. Actualmente se desconoce quien será el sucesor de Marín como representante del país centroamericano.