El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) habría suspendido la inauguración de su nueva sede en Managua —prevista para el 15 de diciembre—, en medio del desconocimiento mundial por los resultados de las recientes elecciones generales en Nicaragua, en las que el dictador Daniel Ortega selló su cuarto mandato consecutivo y la posterior ola de sanciones económicas.
El medio de comunicación Confidencial reveló que los países socios del banco justificaron la decisión de suspender la obra argumentando que está “atrasada”, sin embargo una fuente interna manifestó que “algunos querían que se mencionara la inconveniencia del estado de excepción democrática que vive Nicaragua”, pero dado que algunos países requerían hacer consultas para respaldar esa redacción, la situación quedó implícita.
En octubre de 2019 se inició la obra, la cual fue oficializada por el presidente ejecutivo del BCIE, Dante Mossi, y el ministro de Hacienda y Crédito Público (MHCP), Iván Acosta. El proyecto, valorado en 16.5 millones de dólares, estaba previsto terminar a finales de 2020.
Según el medio independiente, Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Panamá, República Dominicana, España, México, Taiwán, y Corea del Sur, más el voto mancomunado de Argentina y Colombia, votaron por suspender la inauguración. Solo Honduras y Nicaragua se opusieron, ya que Belice y Cuba son socios sin derecho a voto.
“En la negociación hecha en Dominicana, esto ya estaba mancomunado con todos, excepto Honduras y Nicaragua. ¡Hasta Taiwán!, con el fundamento de que el edificio no estaba terminado”, señaló la fuente del BCIE al medio de Managua.
Sin inauguración ni reunión
Pero en Managua no solo se realizaría la inauguración de la sede del BCIE sino también se desarrollaría una reunión de directores, la cual quedó programada para llevarse a cabo de forma virtual desde Tegucigalpa, reportó Confidencial.
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A criterio de la fuente, lo que puede hacer el régimen de Ortega para no evidenciar su fracaso ante el organismo y el mundo, es que ordene a su representante votar a favor de la resolución —de suspender la inauguración por razones de retraso—, para que parezca que ese fue el verdadero motivo.
Hasta ahora hay 10 votos a favor y 11 Estados que respaldan la resolución de suspender la inauguración de dicho proyecto, sin embargo está por verse si Nicaragua y Honduras finalmente se unirán para disimular su fracaso en esta obra.
La fuente agregó que la directiva está consciente del riesgo que tiene la entidad si mantiene estrecha relación con Nicaragua, a como ha venido sucediendo hasta ahora, pues es el principal organismo que oxigena económicamente a la dictadura orteguista, por lo que uno de los socios del banco pidió a Mossi que no le dieran lugar a las solicitudes de préstamos para Nicaragua que se presenten en las reuniones futuras con la directiva. Sin embargo, no hubo votación a esta solicitud.
